"Tierras de Amor" Jikook/Kookmin

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Dedicado a:Sombrera1009💜

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Bien apenas, el peli rojo llegó a su cama, se cayó como un costal de papas. Estaba axhausto, le dolía todo su cuerpo, más sus piernas y cintura. Ayudar en esas tareas de establos …había sido muy, muy complicado. Ya extrañaba la ciudad y sus comodidades, con sus calles asfaltadas, hoteles con calefacción y aire acondicionado, y todas las comodidades tecnológicas que se había acostumbrado. Se sintió un poco más triste y deprimido cuando se dio cuenta de que debía seguir pasando más tiempo en ese campo remoto.Sin embargo no había sido tan malo ¿Verdad?, Dijo su mente, recordándo nuevamente la escena con el capataz.

Ese pecho desnudo chocar con su espalda, fue tan seductor, el maldito tenía un cuerpo del infarto, "¿Vamos Jimin, acaso te estás enamorando de ese tipo?" Su voz egocéntrica en su cabeza, lo hizo reaccionar. "¡Claro que no!, Sólo fue un momento, uno normal" respondió su cabeza. No debía mostrarse débil frente a ese capataz orgulloso…"No te dejes estar seducido", dijo la voz, pero estaba difícil controlarse ante alguien tan hermoso. "Esa perfección no es real, es una ilusión", al decir eso, se levantó, y para despejar su mente, se metió en la bañera… tomó un baño caliente, con jabón y agua aromática. Con los aromas de esa agua, se sintió más relajado. "Qué bueno esto", dijo, un poco más tranquilo. Se sentó en la bañera y empezó a distraer su mente, pensando en que podría hacer luego.

Rápidamente salió de la ducha, y se cambió, ésta vez poniendose sólo una camisa Gucci negra con botenes, que llegaban a menos de su rodilla, y un simple boxer. Estaba en su casa, ¿No?, Nadie le diria nada.
Pensó en tomar una cerveza fría, y aceptar la realidad de que estaba frustrado y aburrido. Se decidió y se dirigió a la sala, donde su televisión 4k estaba conectada al sistema sonido 7.1 de alta definición. Acomodó el volumen, y se sentó en el sillón, a solo unos metros de la televisión. Con un simple toque de control remoto, le cambió la cadena, y vio un…documental sobre una celebridad, y empezó a fijarse en cada detalle de la vida de esa persona.

El documental estaba repleto de pequeños detalles de la vida de esa persona, de todas las vueltas y cambios en su carrera. El documental mostraba su niñez, cómo vivió, dónde estudió, cómo lo descubrieron, y cómo se hizo famoso, cómo vivía y esas cosas.
Luego cuando terminó.Recordó a Jackson, hace horas que había llegado, y ni siquiera se había dado de que su prometido no estaba. La verdad es que no le importaba si estaba o no, pero se le hacía raro…que Jackson no hubiera dicho nada desde que llegó a casa. Había estado ocupado con su documental y solo le había pasado un poco por la cabeza. Se puso de pie y fue hacia la cocina a buscar algo de comer, pensando que seguramente Jackson tenía hambre, y tal vez debería cocinar algo. Se dirigió al refrigerador, y lo abrió. La luz blanca del refrigerador le ardió los ojos. Busco la jarra de agua.

Sin embargo no la encontraba, lo que no se había dado cuenta, era de la precencia del moreno observandolo.
El capataz estaba en un pequeño transe, viendo las piernas blancas tonificadas del contrario, su mirada se dirigió hacia sus muslos, se veían tan redondos y perfectos. Jungkook tocio separando su mirada del cuerpo del peli rojo. Jimin se alejó del refrigerador preocupado al escuchar aquel ruido, reencontrando miradas con el capataz.

-Yo... Vine a dejar ésto- dijo Jungkook observando el cuerpo del peli rojo. Jimin no sabía que decir, ni siquiera se había percatado de su presencia, había entrado sin hacer ruido alguno. Pero lo que ahora veía, era como éste lo miraba directamente, con concentración sobre el. Allí se percató, que estába semi desnudo, mierda ¡Qué vergüenza!, Pensó.

…Jungkook pasó una mano por su pelo, y parecía avergonzado, pero inesperadamente, un pequeño sonrisa comenzó a crecer en su rostro.

-Mm creo que ya me voy - dijo, intentando no mirar el cuerpo de Jimin.

-Espera...- dijo deteniendolo, no sabía porque lo hizo, ¿¡Qué mierda!?, ¿Por qué lo detuve?, Pensó.-Digo... eh yo ya me iba, puedes entrar si eso quieres- dijo terminando lo último con firmeza. Se estaba dando cuenta, que estaba siendo débil. Y era algo que se había prometido no ser. Decidió llenar su vaso con agua, dispuesto a salir.

-¿Puedo preguntarle algo?- preguntó Jungkook, serio. Jimin paró, mirándolo.
-Dime- dijo, esperando la pregunta. El capataz se acercó, más a él.

-¿Qué hace despierto a ésta hora?- preguntó, levantando una ceja. Jimin frunció sus labios antes de hablar.

-Yo debería preguntar eso Jeon- dijo sin responder a la pregunta. Jungkook carcajeo. Jimin cruzó sus brazos, no sin antes dejar el baso sobre la isla de cuarzo.

-No entiendo la gracia- dijo serio.

-Lo siento...- dijo parando el moreno.-Yo... cuido el lugar a la noche- avisó, mirándolo directo.-¿Esta enojado conmigo, señor Park?- preguntó viendo la seriedad del peli rojo, aunque la verdad se le hacia tierno su rostro.

-Como sea, no me interesa lo que hagas tú a estás horas- dijo, con intensiones de salir de allí. Jungkook amaba molestar a su jefe, era tan lindo cuando se ponía rojo por el enojo, o fruncia esos labios.

-Espere- dijo tomándolo rápido de su mano.
Jimin lo miró sin comprender- Su agua- dijo acercandole el pequeño vaso, en sus manos. Jimin lo tomó un tanto enojado. Pero el capataz no parecía estar en lo mismo, ya que su mirada iba directo al pecho del pelk rojo, la camisa trasparente, no dejaba nada a la imaginación, podía ver aquellas tetillas rosadas, como un botón, y sus claviculas notables

-Linda camisa- dijo Jungkook con una sonrisa de lado mirando nuevamente a su rostro. Alejándose de él no sin antes decir- Buenas noches señor, mañana nos veremos de nuevo- para salir de allí.

"¿¡Qué tanto veía!?" Se preguntó rojo, sentía sus mejillas arder. Dirigió su mirada a su pecho, dándose cuenta, que la maldita camisa era medio transparente, y se veía todo. Sentí su rostro morado como el de un tómate. Jimin estaba abochornado, no sabía qué hacer, sabía que había quedado retratado. ¿Por qué le había puesto esa maldita camisa? ¿Por qué no había estado más atento?

Ya había perdido apetito, ese capataz le quitaba todas ganas. Dejó el vaso a un lado, y se dispuso a ir a la habitación.

Mientras tanto Jungkook...

No podía dejar de sacar de su mente aquel cuerpo, ¿Qué le pasaba?, No solía observar de esa manera a los cuerpos extraños. Pero sólo ésta vez... Le dió curiosidad, y como se dice la curiosidad mató al gato. Ahora no podía dejar de pensar en aquellos muslos, su trasero tan redondos, sus piernas, sus tetillas... ¡Jungkook es tu jefe, y a un peor, está comprémetido!, Esa voz haciendolo entrar en razón. Cambió su rostro, sabía que el señor Jimin no estaba del todo enamorada de Jackson, algo en el lo intuía

Jijiji holas como saben comenzamos nuevamente con éstas historias.