Café, gatos, vampiros y cazadores [Fanfic Dipper x Bill]

Capítulo 9: Ceder.

Bill abrió sus párpados luego de unas horas, el color había vuelto a sus mejillas y los temblores se habían ido. Se sorprendió al encontrarse envuelto en un mar de mantas, que terminaban formando un montículo sobre su cuerpo, pero más se sorprendió al ver la figura sentada a su lado. No pudo evitar la sonrisa suave que se formó en su rostro.

— Aún sigues aquí— Susurró.

— No por diversión, me debes muchas respuestas, Cipher.

La sonrisa en su rostro se borró rápidamente, el cazador aún seguía molesto y no lo culpaba.

— ¿Sabes que la plata no me lastima verdad? — El rubio comentó al ver la cuchilla con la que jugueteaba Dipper en sus manos, para posteriormente incorporarse, y alejar las mantas que ahora parecían innecesarias. Al parecer el calefactor estaba funcionando, por lo que la luz ya estaba de vuelta. De todas formas, trató de hacer movimientos lentos, lo que menos quería era alterar al cazador, cuando se sentó.

— Lo sé, eres un categoría especial, la plata es el menor de tus problemas, sin embargo, un día en un congelador industrial y veremos.

— Touché.

Ahora Dipper sabía una de sus mayores debilidades, era obvio que la usaría a su favor.

— ¿Qué sabes de ÉL? — El castaño fue directo.

Era la información que más le interesaba de momento al chico, y por la cual se había quedado, no para cuidarlo, se recordó Bill.

— No mucho más que tú. Solo que es el hombre al que buscas, es un vampiro, muy probablemente de categoría especial, y se dedica a exterminar clanes completos, y humanos si son un estorbo en su camino. No es la primera vez que escuchamos de él. Lo apodan "El inquisidor".

— ¿Cómo sabes que es el mismo hombre que buscó?

— Hice mi tarea, además sus primeras apariciones fueron después de la muerte de tu tío. Existe una conexión que aún me es difícil de averiguar. Pero estoy seguro de que es él. Por eso te contacte de forma indirecta, nuestro clan ha perseguido a este hombre en vano, muchos de los nuestros han muerto por ello. Podemos ayudarnos mutuamente si trabajamos juntos.

— No trabajo con vampiros y menos con mentirosos— Dipper fue tajante.

Bill hizo una mueca ante esto, el castaño era testarudo y no cedería fácilmente, y menos si se sentía traicionado, tendría que abordar el asunto desde otro ángulo, quizás si era sincero con él y le mostraba, podría tener una oportunidad de convencerlo de quedarse.

— También tengo un motivo personal para encontrar a este hombre, sé que estas al tanto de mi accidente.

Dipper recordó el informe que su hermana le había enviado sobre Bill.

— Continua.

Su curiosidad era mayor que su enojo.

— No fue un accidente, más bien, fue un ataque. Yo jamás quise esto, antes era humano— Murmuró.

La parte que siguió a continuación no fue nada fácil para Bill, debía enseñarle algo muy personal, un momento de su vida muy vulnerable, pero solo así el castaño podría comprender. Solo así tal vez recuperaría algo de la confianza perdida, al menos lo suficiente para trabajar juntos y que Dipper no se fuera.

El rubio se sacó el suéter y desabrochó los botones de su camisa, todo bajo la mirada atenta del cazador, que no comprendía del todo sus intenciones.

¿Qué es lo que quería demostrar con aquello?

Entonces la última prenda cayó contra sus hombros, relevando las diferentes marcas de mordidas y garras que se esparcían por todo su cuerpo, sus brazos, su espalda, su pecho, todo estaba lleno de cicatrices que no se borrarían jamás, por haber sido realizadas antes de la conversión.