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Narradora Atenea

Pero para ti, estoy libre

Morí y reviví un millón de veces, me hacía demasiadas ilusiones con el, realmente no sabia si yo le gustaba o solo estaba jugando.

El hecho que me halla llamado "linda", de igual manera, lo sentí lindo.

Queria saber si quisieras hacer pijamada mañana, conmigo.

Claro, ¿a qué hora quieres que este en tu casa?

Aquí venia el problema, le estaba invitando y yo no había dicho nada a Ari.

[...]

6:30 p.m.

Llevaba una mochilita nada más, con lo necesario para una pijamada, esperando que el pasé por mi.

Cuando lo hizo, me despedí de Ari y de Juan, diciendo que llegaría temprano a casa, tal vez una mentira, no llegaría hoy pero si mañana temprano.

Si por Juan fuera, no me dejaría ir y mucho menos si era Alex. Pero este no tendría por que enterarse.

-Bien, ¿que haremos? jamás he estado en una pijamada- dijo Alex

–En las pijamadas, se come pura chatarra, cuentan historias o sus secretos, platican de lo que les venga a la mente y duermen hasta tarde– dije

Estabamos en su departamento, donde el se estaba quedando durante esos dias. No era chico, era lo suficientemente grande, me sorprendía por lo grande que era que solo el se este quedando ahi. Me llamaban la atención bastante la decoración del hotel, es decir no era muy extravagante, pero ni muy sencilla.

–Dormiremos en el cuarto, no dormiremos acá en la sala ¿verdad?– pregunto

–Si tu quieres– dije

–Bueno– dijo y se fue a la cocina a buscar algo

–Alex – dije llamando su atención – ¿tu que haces cuando estas aburrido?–

–mmmh– pareció pensarlo mucho – pues no se, a lo mejor escribir para el lore del QSMP, juego, salgo a pasear, hablo con amigos, cocino– respondió

–¿Cocinas?– dije

–Cuando quiero, no es que sea un chef profesional, pero si cocino rico– dijo

–¿A poco si?– el asintió – Pues cocinemos entonces–

Dije sugiriendo aquella idea, después podriamos ver pelis para comer lo que habiamos cocinado, total ¿que podria salir mal?

[...]

7:45 p.m.

–Gracias– dije, agarrando lo que aquel chico amable habia traído y cerrando la puerta.

Aquella bolsa lo había dejado en la mesita de la sala, mientras Alex limpiaba.

Si, Alex limpiaba aquel desastre que habiamos dejado. Pensé que podríamos cocinar algo rico, en vez de eso, la comida se nos habia quemado por estar metiendo relajo. Al agarrar el traste y quererlo bajar, se le resbaló y cayo todo el en suelo.

Y de ahi pasamos aqui, decidí pedir comida apenas paso todo ese desastre.

Alex soltó un suspiro, mientras se sentaba a mi lado en el sofa de la sala mientras pensaba por lo que habiamos hecho.

Noche Estrellada, Así Cómo Tú Rostro || QuackityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora