My Golden King (Nikolai Lantsov - Fanfic)

Drüskelle

El colibrí se acercaba a las orillas de entrada de Fjerda. Y ellos no parecían querer recibirlos de forma muy amistosa.

Nikolai y algunos de la tripulación bajaron del barco para negociar.

Uno de los Fjerdanos principales se acerco. Y Nikolai camino hacia él dejando a los demás un poco atrás.

Sam miró a los grandes hombres cubiertos con trajes de piel y llenos de nieve.

- Bienvenidos, ¿En qué podemos ayudar?

- Podíamos buscar un lugar menos frio para empezar -bromeó Nikolai.

Al Fjerdano no pareció causarle mucha gracia el chiste.

- Bueno.. cómo bien sabemos la sombra no tardara en desaparecer. Y creo que es importante que limemos asperezas entre naciones.

- ¿Y cómo planea limarlas? -pregunto el Fjerdano inexpresivo.

*Ahora quizá Matthias serviría de algo* pensó Sam.

- Para empezar, venir aquí y firmar algunos acuerdos. Podríamos comenzar hablando sobre el transporte y comercio de mercancía Fjerdana. Quizá algunos barcos de Ravka puedan acelerar el proceso si es necesario.

- Suena bien pero, ¿Cómo planeas negociar con nosotros si proteges a los grisha bajo tu corona?

- ¿Qué? -pregunto Nikolai.

Pero antes de que pudiera decir otra cosa un pequeño sonido llamo la atención de todos.

Una flecha.

Había caído a un lado de Nikolai. Como si hubieran fallado con toda la intención.

Sam se preocupo. Habían intentado atacar al futuro rey.

En un reflejo levanto los brazos para hacer los suaves movimientos que sabe de memoria. Pero antes de que pudiera continuar un pequeño artefacto de metal envolvió sus muñecas causando ardor y pegando sus brazos a su cuerpo.

Otro artefacto igual termino en su tobillo en segundos. Los Drüskelle comenzaron a arrastrarla hacia ellos.

Nikolai enfureció.

- ¡Suelténla! -gritó tomando su arma.

- Lo siento, pero ella intentó atacarnos primero. -replico el Fjerdano.

- No, ustedes ¡dispararon primero!

- Nos llego el rumor de que el futuro rey tendría cómo protegida a una grisha. Y además tendría el descaro de traerla a tierras Fjerdanas. No sabíamos cómo luciría pero un pequeño movimiento bastaría para identificarla.

Sam grito a lo lejos.

- La dejaremos ir, solo por esta vez, pero no firmaremos ningun acuerdo.

Tamar se acerco a Sam para desenvolverla después de escuchar esas palabras.

- Nikolai, esta herida -avisó Tamar.

Nikolai se acercó. Las muñecas y el tobillo de Sam habían sido heridas con pequeños metales que las cortaron al envolverse en su piel.

- Llévenla al barco, necesitaremos un sanador -ordenó Nikolai con un tono preocupado en su voz.

Tolya y Tamar levantaron a Sam y la ayudaron a subir al barco.

- Sé que no querían una guerra -habló Nikolai dirigiéndose a los Fjerdanos- por eso no me atacaron a mi. Pero esto definitivamente marca un conflicto en nuestras naciones a partir de hoy, por que ella no solo es mi "protegida" como la llaman.