Había una sensación extraña el pecho de Ivan, una que no sabía identificar. Realmente no sabía que era.
Era como si su corazón se achicara, como si lo apretaran muy fuerte.
Su garganta se secaba y su respiración se a eceleraba.
Pero no era una buena sensación, una linda. Lo contrario, era una sensación fea, muy horrible.
Lo que si sabía era que cuando alguien se acercaba con otra intención a Rodrigo, sucedía.
Y pensándolo bien, se dio cuenta lo que tenia...
CELOS
Celos, el tenía celos. Celos de que alguien se acerque a Rodrigo, que alguien más tenga su atención, que alguien lo lastime, que alguien lo aleje de él para siempre.