Capítulo 3

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"Algunas verdades duelen"


Ambos hermanos empezaron a bajar las escaleras de la Torre Koi, dejando a todos en el salón con la palabra en la boca y tratando de procesar el que Wei Wuxian tenía otro hermano.

—¿Cómo están?

—Parecen estar bien, pero insisten en querer hablar contigo. —habló Binghe, quien iba preparando a su espada, Xin Mo, para iniciar su viaje.

—¿Te dijeron de que? —Binghe negó—. De acuerdo,  entonces tenemos que...

—Lianhūa, espera. —Escucharon a sus espaldas. Ambos voltearon y se encontraron a Jiang Fengmian bajando las escaleras hasta donde estaban ellos—. No te vayas por favor, necesitamos hablar.

—Tengo cosas que hacer ahora, pero no se preocupe, no me voy a ningún lado hasta lograr lo que vine a hacer. —Siguió bajando las escaleras, siendo seguida por ambos hombres—. Su familia está allá adentro, líder Jiang.

—Ustedes también son de mi familia. —Lianhūa le hizo una seña a Luo Binghe para que se adelantara, cosa que acató.

—¿En serio?, ¿Por qué?, ¿Por ser hijos de tus mejores amigos? Pues te olvidaste de ese detalle cuando permitiste que le faltaran el respeto a Wei Ying de esa manera, o de tratarlo de un monstruo insensible. —Fengmian se mantuvo callado—. Hubieras recordado que somos tu "familia" cuando fuiste uno de los que encabezó el asedio a los Túmulos Funerarios.

—¿Y qué querías que hiciera?, ¿Que fuera en contra de todas las sectas y que pusiera en peligro a mi familia por una sola persona?

—Yo lo hice. No tienes ni idea de con cuantas personas me tuve que enfrentar porque le faltaron el respeto a uno de mis hermanos. —Lianhūa se acercó lentamente al Jiang—. Te dejé la responsabilidad de cuidar a Wei Ying, solo porque me aseguraste que iba a estar mejor bajo tu techo. Yo te hice caso, incluso te di mi palabra de que si protegías a Wei Ying, yo protegería a tu familia. Yo cumplí con mi parte, te salvé a tí y a tu esposa de ser asesinados por los Wen, evite que Wen Ning apuñalara a Jin Zixuan y salve a tu hija de ser apuñalada cuando entró en el campo de batalla. ¿Y tú?, ¿Que hiciste por mi familia? —se pegó la vuelta y siguió con su camino, hasta desaparecer de la vista del Jiang, quien no sabía cómo reaccionar ante aquella información.

Ella no mentía, lo sabía, porque lo recordaba.

Recordaba estar peleando junto a su señora en Muelle de Loto, mal heridos, cansados y mareados por la cantidad de humo que habían inhalado. Cuando vieron que habían llegado refuerzos para el ejército Wen no pudieron hacer otra cosa más que aceptar su destino, pero antes de que un soldado Wen atacara, fue atravesado por una lanza desconocida, dicha arma salió del cuerpo del Wen y comenzó a volar por todas partes, acabando con los enemigos. Luego, se escucho una especie de explosión, se giraron y vieron como varios de los soldados salieron volando cuando una bola de energía impactó contra su grupo, lastimando a muchos y haciendo retroceder a otros cuando más de esas esferas fueron apareciendo. Recuerda cómo, cuando todo paró, una figura encapuchada salió de entre las sombras, les entregó una bolsa con medicinas y luego se fue, llevando su lanza consigo.

También recordaba como Yanli corría desesperada por Ciudad sin noche, gritando el nombre de Wei Wuxian y tratando de hacerlo entrar en razón. Entonces, apareció un cadáver feroz con una espada, el cuál arremetió contra la joven aterrada, pero, antes de que la marioneta pudiera tocar a su Yanli, apareció aquella Lanza otra vez y se llevó consigo a la marioneta, clavándose en el cuerpo de ese cadáver viviente y evitando que su hija saliera herida. Al igual que evitó que aquel cultivador hiriera a Yanli y a Wei Wuxian cuando éstos dos estaban hablando, saliendo del cadaver y estrellándose en el piso con una fuerza sorprendente que mandó a volar a ese cultivador como a una gran cantidad de cultivadores y marionetas.

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