Victory | Levi Ackerman

15 | Rayos de sol

𝒱𝒾𝒸𝓉𝑜𝓇𝒾𝒶

Estoy terminando de curar las heridas de Eren Jaeger, cuando Erwin decide que es buen momento de romper el incómodo silencio que nos inunda.

No presencie el juicio por pedido de Levi, según él, correría sangre y yo no aportaría nada, un dulce, lo sé. Yo imaginaba que la sangre de los altos cargos era a lo que se refería, pero no, y eso lo confirme cuando entraron casi arrastrando a un medio muerto Eren.

Sin dudas las patadas de Levi te mandan con diosito y te traen de vuelta a la vida.

Eso me hace dejar de creerles a los religiosos de la iglesia que confirman haber tenido un encuentro con Dios, no, rezar no te lleva con él, si lo quieres conocer solo necesitas de una patada de Levi.

-Lo sentimos-dice Erwin, pero dudo que Levi lo lamente, lo note muy divertido cuando entró-. Aunque logramos transmitirles al general y los otros influyentes tus verdaderas intenciones y tu verdadero yo. Así que valió la pena tu dolor. Te admiro-dijo extendiendole la mano-. Eren, contamos contigo de ahora en adelante.

Eren extiende la mano, pero su rostro parece el de Levi al ver una nueva escoba. Espero que no se haga encima de la emoción.

-Sí, y yo con ustedes-dice Eren emocionado.

Entonces, siento que algo me aplasta.

-Oye, Eren-dice Levi, ha ocupado el asiento entre nosotros, y para eso casi me ha aplastado la mitad del cuerpo, obligándome a moverme, lo miro mal, pero me ignora.

-¿Me guardas rencor?-pregunta Levi.

Yo sí, siento ganas de gritarle.

Pero no me parece buen día para tentar a la muerte.

-No, no. Entiendo que era una actuación necesaria.

¿Actuación?

Dudoso.

-Entonces estamos bien-sentencia Levi.

-Pero hay un límite para todo, ¡le tumbaste un diente!-exclama Hange.

Cubro mi cara con mi mano.

Levi la mira como si le estuvieran planteando una locura.

-Sigo pensando que es preferible que haber sido disecado allá.

-Esa es una muy mala excusa-aclare, Levi voltea a verme con desinterés-. Es un niño, que sea un titán no creo que lo haga inmortal y con tolerancia al dolor. Además, recién me aplastó.

-Claro, dejeme anotarlo en el boletín de cosas que me importan una mierda.

Empujo su hombro, y él me devuelve el empujón, y como dos niños nos estamos dando golpes, en los que claramente controla su fuerza o ya habría atravesado todas las paredes de la corte.

-Le está brotando el diente-murmura Hange, e inmediatamente todos volteamos hacia Eren.

-Entonces podría no haberme contenido-se queja Levi.

-¿Gracias?-duda Eren, aunque se le dificulta hablar por las manos de Hange revolviendole la boca.

Que asco.

-¿Se contuvo, capitán?-digo sarcástica-Si no se contenía entonces nos hubiera dejado sin Eren Jaeger, le harían un juicio a usted. Aunque a decir verdad, deberían hacerle un juicio, es ilegal ser tan despreciable.

-¿Que prosigue?-cuestiona Levi, siento su brazo extenderse por detrás de mi espalda, y su dedo picar mi hombro intensamente, me saca de mis casillas, quiero escuchar lo que Erwin dice, pero no puedo evitar pensar en ese gesto tan molesto.