Victory | Levi Ackerman

24 | Destino

𝒱𝒾𝒸𝓉𝑜𝓇𝒾𝒶

-Niña, tu padre ha llegado por ti.

Días, horas, no sé cuánto tiempo llevo en esta oscuridad, totalmente sedada.

Había regresado a casa en búsqueda de Kenny, necesitaba encontrarlo, pero en su lugar me encontré a Rod Reiss, y desde entonces me tiene atrapada aquí.

Inutil. Tonta.

Todo estaba claro como el agua.

Mi tiempo en este mundo estaba contado y repleto de arrepentimientos.

Que vida de lo más miserable.

Aún sin estar en esta realidad, siento como soy arrastrada por los pasillos. Se oyen balas, gritos, caos. A lo lejos, pero aquí mismo.

No sé qué está pasando, no sé donde estoy, no sé nada y eso es más aterrador que cualquier ruido de bala.

Cuando la luz impacta contra mis ojos, me obligo a cerrarlos. Me lastima y tardo en acostumbrarme a ver algo más que una habitación a oscuras. Pero cuando finalmente lo hago, oh mierda. Kenny sostiene a Rod Reiss por el cuello, dejando un cuchillo muy cerca de su boca.

-Kenny, detente. O ella pagará por tus acciones.

-¿Que mierda le has hecho?-grita Kenny cuando me ve ingresar, los soldados de Rod Reiss me dejan tirada en el suelo, apenas puedo moverme por mi cuerpo adormecido. La muerte suena tentadora, un descanso eterno después de estas pesadillas.

-Historia, no puedo confiar en nadie más-exclama Reiss-, si tu...si tu no haces esto, esa chica nos destruirá a todos.

-Si, es probable-lo suelta Kenny.

-¡Padre!-Historia corre a ayudarlo, ¿cuando mierda le tomo cariño? Kenny retrocede ligeramente poniéndose frente a mi.

-Hasta ahora lo has hecho bien-dice Reiss mirando hacia nosotros-. Me siento orgulloso del juicio de mi hermano en ese entonces, ¿hacer pasar a su hija por la bastarda de un criminal? Brillante. Son libres siempre y cuando, busquen otra vida lejos de aquí.

Las ideas resuenan en mi cabeza. No sé si la droga me ha hecho mal, pero no logro hilar sus palabras. No puedo o no quiero. Kenny no dice nada, y solo quiero que diga lo que sea, que me saque de aquí. No quiero oír nada, porque no estoy segura de lo que estoy oyendo, una barbaridad, una mentira cruel y despiadada. No lo sé, no me interesa. Solo quiero que Kenny me sostenga y huyamos, quiero dejarlos a todos atrás, no quiero vivir más esta vida.

Solo quiero a mi papá.

-Eso va a ser aburrido-sentencia Kenny mientras se acerca y me toma en brazos. Comienza a subir la larga escalera tranquilamente, y por un momento, me siento como si fuera una niña que se quedó dormida en cualquier sitio.

-Kenny, ¿qué estás haciendo?

-Sigan adelante y conviértanse en un titán, yo no voy a meterme en su camino-me deja de pie junto a un muro-. Sin embargo, tienen que esperar hasta que yo diga-sostiene a Eren del cabello y le quita la mordaza-. Ya que esto va a ser una pelea entre titanes, si Historia gana entonces la humanidad tendrá su paz...Pero si pierde contra Eren, nada va a cambiar-saca su cuchillo-. Es difícil morderte la lengua ¿verdad?-hace un tajo en su cabeza-Así que te daré una mano. Mantener la respiración hasta que uno se muera por la vejez, ¿que clase de vida es esa?

-¡Historia!-Reiss se acerca a su hija con la jeringa en mano-. No te preocupes, después de ponerte esta inyección te convertirás en un titán poderoso, elige el titán más adecuado para la batalla. Incluso si pierdes la razón, todavía tienes una oportunidad en este momento, Eren está atado. Date prisa, incluso si sólo se trata de comer solo tienes que masticar a través de su espina, y comerte toda su médula espinal.