Wonka y t/n (Timothée Chalamet)

Cap 8

Algo peludo salta encima de Maddie tirándola al suelo

¡Dante! —exclama Maddie sonriendo. —Yo también estoy feliz de verte

—Hola Dante, nos
asustaste —dice Nuddle soltando el aire de sus pulmones.

—Hola amiguito —saluda Willy y Dante se acerca a él para olfatearlo

—Le caes bien —dice Maddie.

— ¿Willy como vas a hacer más chocolate?

—Pues con mi fábrica de viaje —responde mientras acaricia a Dante. —Aunque ahora que lo pienso....ya no hay más leche

—Eso no es un problema —dice Nuddle y agarra una leche que está enfrente de la puerta de una casa.

— "A" ¡Eso es robar! —exclama Willy quitándole la leche a Nuddle y la deja en su lugar
otra vez. —Y "C" Willy Wonka no usa la leche de cualquier vaca

—Es B —corrige Maddie.

— ¿Que?

—Después de la "A" va la "B"

—Oh —dice Willy. El punto es que para esta creación necesito la leche de una jirafa

—Entiendo... —dice Nuddle.

—Por suerte hay una en el zoológico

—¡Bien! —dice Willy caminando hacia la izquierda

—Pero "A" el zoológico no es hacia esa dirección —dice Maddie y Willy camina hacia la derecha. — Y "B" no te van a dejar entrar a ordeñarla

—Es por eso mi querida Maddie que tenemos suerte de que el hombrecillo no viera el chocolate que tengo en mi bastón—Willy abre la parte de arriba de su bastón y saca una cajita

—No Dante, eso no es un juguete—dice Maddie cuando Dante comienza a ladrar.

—Prometo traer algo para ti la próxima vez amiguito —habla Willy y Dante le responde con un ladrido

—Tengo que irme Dante ¿nos vemos después si? —dice Maddie y le da un abrazo a su perro.

Ya era de noche, Maddie, Nuddle y Willy se encontraban en el zoológico para llevar a cabo el plan. Willy y Maddie estaban escondidos detrás de un carro mientras esperaban que Nuddle hiciera su parte del plan.

—Listo —susurra Nuddle y se esconde detrás del carro también.

—Bien hecho Nuddle —dice Willy.

—¿Y el chocolate que le di al guardia para que sirve?

—Se llama "la gran noche" es un chocolate que imita perfectamente una noche de fiesta —explica Willy. La capa exterior es una trufa de champaña

"Me encantó" —escucharon decir al guardia

—La siguiente es vino blanco

"Que suave"

—Sigue la de tinto

"Ooh esto se puso bueno" —Los tres podían ver la sombra del guardia que bailaba en su caseta de vigilancia

—Es cuando empiezan a cantar y a bailar

"Nos vamos a ir de fieeeesta esta noche" —Maddie cubría su boca para no reír y Nuddle miraba la escena con el ceño fruncido.
—Y con la capa envinada con Whisky se pondrá sentimental

"Es la única mujer a la que he amado" —se le escucha decir mientras llora.

—Y.... puede que haga una tontería

"Ayy la voy a llamar ¿Que puede pasar? —se puede ver en la sombra como el guardia levanta el teléfono. —Solo quiero decirte que te amo y te he amado siempre.... espera, no cuelgues

—por último un Oporto viejo que había en la alacena y.... cae dormido

—Wow —dice Nuddle.

—Ahora entremos
••••••••

—¿Porque no se van volando? —pregunta Nuddle mientras ve hacía el estanque de los flamencos

—Tal vez no se les ha ocurrido —responde Willy.

—Es broma

—Lo digo en serio, es la cosa con los flamencos, necesitan que les enseñen que hacer

—Oh —dicen las dos chicas.

Caminaron un poco más hasta que llegaron a los cuartos de los animales

—Aquí está—dice Willy abriendo una puerta.

—¡Eso no es una jirafa! —Maddie cierra la puerta antes de que el Tigre pudiera comerse al rizado.

—Tienes que aprender a
leer —dice Nuddle.

— ¿Porque?

—Willy, un Tigre casi te
come —responde Maddie

—El casi no cuenta, "Casi" me han comido muchas cosas y ninguna me ha dado mas de un mordisco—dice sonriendo.

Maddie y Nuddle miran a Willy serias

—Ok aprenderé

—Miren, ahí está —dice Maddie acercándose a la puerta que dice "Jirafa"

—Buenas noches —saluda Willy inclinándose hacia la jirafa en forma de respeto. —señorita ¿ehh?

—Abigail —susurra Nuddle.

—Señorita Abigail

La jirafa avanza hasta donde están los tres chicos

—Wow, tranquila señorita —dice Willy. —Mentas de acacia para usted

La jirafa huele las mentas y las come de la mano de Willy

—A las jirafas les encantan estas mentas, también les gusta que les rasquen las barbilla ¿quieren intentarlo?

—Yo si —dice Nuddle y se acerca lentamente a la jirafa para rascar su barbilla

—¿Ves? —dice Willy

La jirafa lame a Nuddle y los tres ríen

—Le caes bien —dice Willy

—Señorita Abigail, si mi querida colega le da una rascada ¿nos permitiría tomar medio o un litro de su leche?

La jirafa sacude sus orejas como respuesta

—Muchas gracias

—Ustedes dos quédense aquí y yo vigilaré afuera que no venga nadie —dice Maddie.