Maddie(T/n) calló en el engaño de la señora fregoso y el señor Bleacher (Lejía), ahora tiene que trabajar toda su vida hasta pagar su deuda pero la vida de ella y de todos cambiará gracias a un joven llamado Willy que llega a la ciudad en busca de...
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Ya era de día. Maddie, Nuddle, Larry, Lottie, Piper y Abacus tenían una sorpresa preparada para Willy
— ¿De verdad siguen sin creerme que el hombrecillo naranja de pelo verde me golpeó con una sartén?
—De verdad no —dice Nuddle.
—No —dicen los cinco al unísono.
—Pero afortunadamente hoy no es necesario vender chocolates —dice Maddie con una gran sonrisa.
— ¿Que porque no?
— ¿Ves el local con el que sueñas siempre? Ahora es tuyo
Maddie sonríe al ver cómo los ojos de Willy brillan
— ¿D-de verdad?
—Sip —dice Nuddle
Willy sonríe y comienza a saltar y a correr de un lado a otro emocionado.
— ¡Tengo mi tienda de chocolate! —exclama el rizado.
Sin previo aviso, Willy levantó a Maddie en sus brazos y la giró en el aire, ella soltó una carcajada de pura emoción. Finalmente, la posó suavemente en el suelo y la atrajo hacia él en un cálido abrazo. Sus corazones latían al unísono, como una melodía perfecta.
En ese instante, el mundo entero desapareció a su alrededor, dejando solo espacio para ellos dos. Willy acercó su rostro al de Maddie y le entregó un tierno beso. Todos los presentes abrieron la boca sorprendidos
Willy se dió cuenta que besó a Maddie enfrente de todos y rie nervioso
—Disculpen, fue la emoción
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Willy abre la puerta del local y todos entran encontrándose con un espacio grande y oscuro
—Se lo que estás pensando Willy —dice Abacus. —Puede que este lugar necesite algo de trabajo
—Parece que dejaron abierta el agua por veinte años y se cayó el techo —dice Piper. —Y también el techo de arriba, y el de arriba de ese....
—Y por eso podemos pagarlo —responde Abacus. —Por una semana al menos
— Y será un negocio legítimo, la policía ya no tendrá pretextos para molestarnos
—Gracias —dice Willy. —Es lo que siempre imaginé.... Olvídenlo, en realidad es mucho mejor de lo que imaginé. Solo miren este local, si está en ruinas ¡pero lo que importa es el potencial, la estructura! Les prometo que esta será la mejor tienda de chocolates que el mundo haya visto
— ¡Wohoo! —exclama Piper.
—No lavarás por mucho tiempo Nuddle ¡Todos seremos libres! ¡Libres cómo flamencos!
Nuddle corre hasta Willy y el la recibe con un gran abrazo.
Lo que no sabían ellos es que los chocolateros estaban planeando algo muy oscuro.
