XVI. Decepción

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Rose pov.

Comencé a correr casi por instituto cuando vi sus ojos encontrar los mios. Llevaba varias cuadras cuando sentía pisadas detras de mí...

Mi velocidad comienza a decaer con los minutos y apenas llegó a la plaza alguien jala de mi.

- Mi-na...

Agotada susurro su nombre y esta tira rápidamente de mi escondiéndonos de lo que parece ser la tercera persona. Me escabullo en los arbusto y Lisa... sigue corriendo mirando a todos lados.

Después de varios minutos de duda de la castaña esta sigue su paso al recuperar algo de aire.

El corazón se me parte al verla ir con su rostro lleno de preocupación pero yo no podré lidear con esto ... menos en estos momentos.

Me dejo caer al suelo y mina sigue mis pasos. Intentamos recuperar el aliento por un momento hasta que la tristeza surge de nuevo en mi provocando que mis lagrimas cayeran en silencio.

Mina abraza mi hombro llevando hacia ella y lo permito. Su contención me genera tranquilidad...

Su respiración comienza a normalizarse al contrario de la mía que se agitaba por el llanto.

Después de varios minutos... logré mantener la calma y carraspeo antes de decir algo.

- No se donde ir... Lisa de seguro me buscará en mi departamento.

- Facil, Vamos a mi casa

Por un momento me sorprendo por la intimidad que puede involucrar eso, después de todo no hemos tenido mucho contacto con Mina pero después de sopesar la idea y no tener muchas opciones aparte jisoo que de segura será la segunda opción que elegiría la castaña.

- Esta bien, vamos.
- Okey

Caminamos en silencio hacia la avenida principal y tras un par de minutos tomamos un colectivo. El silencio en el auto me permitió pensar, quizás más de la cuenta decayendo mi estado de animico.

Me encogo entre el asiento y mina lo nota. Acerca su mano a mi cabeza y acaria mi cabello con delicadeza.

- Todo estará bien Chae

Su tacto me deja fuera de lugar, como si una sensación agradable se extiende por todo mi cuerpo aunque intento disimularlo.

- Gracias mina por todo
- Siempre puedes contar conmigo.

Esas fueron sus últimas palabras hasta finalizar el recorrido. Decendemos frente a un edificio lleno de departamentos, y entramos saludando al guardia de turno

Subimos al séptimo piso en absoluto silencio y apenas nos detenemos mina saca una tarjeta abriendo la puerta con un sensor. Ingresamos y por un momento no se que hacer, mina lo nota y sonrie risueña.

- Bienvenida, Siéntate en casa

Su departamento estaba perfectamente ordenado, tenía un leve aroma dulce esparcido por lugar, seguramente era el perfume de la propietaria. Me acomodo en el sofa de la sala de estar y mina se dirige a la cocina americana con la cual contaba.

- Prepararé un te de melissa para que puedas descansar bien  ¿Te parece? - Sonríe dulcemente y asiento devolviendo el gesto.

Luego de un vaga conversación trivial, ella parece querer preguntar  la causa de mi comportamiento pero  se limita a no hacerlo y lo agradecia, no desea hablar del tema.

- Es tarde, deberíamos descansar ¿no crees?

- Si, claro.

La sigo a traves de un corto pasillo y llegamos a su cuarto.

Ai no kaika (Chaelisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora