Ai no kaika (Chaelisa)

XXIV.- Cadenas

Lisa pov.

Observo la noche a través de ese oscuro cristal como si fuera lo más cotidiano del mundo, apesar de que era asi nunca logré acostumbrarme a estos lujosos autos...

Suspiro pesadamente y me mantenga absorta en las calles de seúl en dirección a aquel elegante restaurante donde se realizaría una cena "familiar".

"¿Familia?¿Qué era eso realmente para mi"

Al fin y al cabo estaba metida en este embrollo por ellos. Pero...

"¿Porqué negarme?"

El desánimo me envuelve al recordar a chaeyoung. La situación pasa por mi mente como un breve video...

No había mucho que hacer realmente con ello, estaba atrapada en esto. Siempre lo estuve al fin y al cabo aquel acuerdo estaba establecido hace ya bastante tiempo.

"Libertad a cambio de mi vida amorosa"

Bueno, ese es el punto.

" Mi lazos amorosos finalmente les pertenecen..."

Sopeso la idea nuevamente, aquella decisión la tomé hace ya mucho cuando mis padres me exigieron formar parte B.W corporation, la empresa familiar. Fue fácil comprender que si deseaba mi libertad respecto a mis estudios y dirección de mi vida, debia ceder en algún habito.

Las cosas estaban dicha, el destino estaba marcado hace mucho pero aún así mi deseo de estar con ella sigue intacto.

El auto lentamente comienza a descender su velocidad y tras un largo momento de viaje ya estaba aquí.

El chófer abre la puerta y extiende su mano, de cierta forma todo está situación me traía un mal presentimiento.

Dudo un momento en tomar su mano pero al fin lo hago después de todo no había elección.

"Veamos que traman ahora..."

Rosé pov.

Estar al fin en "casa" se sentía reconfortante. Era extraño llamarlo hogar pero poco a poco se ha convertido en ello...

Me encontraba sola en el departamento, de cierta forma agradecia que Mina tuviera turno y no llegaría hasta las 23:00hrs. Tenía tiempo aún para poder recuperarme de lo que había ocurrido...

Me dejo caer en aquel sillón que adornaba el pequeño valcón y suspiro pesadamente antes de darle un gran sorbo a aquel cargado café.

La noche se expande por todo la ciudad de seúl haciendo destacar cada una de las luces que la adornaban.

Perderme en aquellos brillos me trai recuerdos de mis noches en el valcón en el departamento de la castaña.

Después de todo siempre intentábamos pasar al menos unos minutos en aquel lugar contemplando la noche mientras nuestras palabras surgian de lo profundo de nuestras mentes... exponiendo cada uno de nuestros pensamientos.

El pasado en la conversación siempre se hacía presente y nuestra historia familiar aveces tomaba el control.

La castaña rara vez hablaba de ellos y usualmente yo era la que buscaba respuestas que pocas veces eran dichas. Las dudas nunca fueron resueltas, nunca comprendí porque debía cumplir con las peticiones de sus padres... ella nunca lo menciono, nunca quiso hablar de ello.

Apesar de ello los rumores surgian en los pasillos de la escuela y rápidamente se cuestiono la posición económica de Lisa. Muchos decían que sus padres eran dueño de alguna empresa multimillonaria, aunque otros simplemente se negaban a creerlo.