𝓑𝓮𝓷𝓰𝓪𝓵𝓪𝓼 𝓘𝓭í𝓵𝓲𝓬𝓪𝓼|| BAKUGŌ X TN || MEDIEVAL AU

CAPÍTULO VIII

- ¿Qué? -. El príncipe se alejo unos centímetros de la chica pero aún mantenía su antebrazo sobre su cuello. Miraba confundido a la bruja mientras que esta se retorcía para liberarse del agarre del chico. 

- Si me suelta prometo que le diré más a detalle lo que sé.-  forcejeó ____. El rubio ceniza gruñó mostrando sus colmillos. 

- Escúchame bruja. No te quiero cerca de mi. Ya tengo suficiente con que te hayan perdonado la vida. Llévate tus mentiras con alguien que las crea.- Finalmente soltó a la chica alejándose de ella por completo pero sin quitarle los ojos de encima a cualquier movimiento que ella pudiera hacer.

- Lo que digo es verdad alteza.- contestó ____ llevándose su mano derecha hacia su cuello para aliviar el ardor que le había dejado el ataque y forcejeo.

-Mentirosa.- masculló Bakugo.

- ¿Por qué mentiría cuando ya tengo mi libertad asegurada?- preguntó retorica la chica haciendo que el joven príncipe se replanteara sus ideas pero sin hacer ninguna expresión que pudiera delatar esta realización.  - A diferencia de usted he salido. He estado en distintas tierras y creo que ambos podemos estar de acuerdo que los humanos buscan cualquier fuente de poder para su beneficio.- continuó hablando la bruja levantándose del suelo. - Existen cazadores que buscan huevos de dragones.- 

- Ningún dragón tiene permitido salir de Ashbel. Menos tener hijos fuera del reino.- 

- ¿Y se asegura que todos obedezcan?-

- ¿Qué podría interesarles afuera del reino?-

- Tengo entendido que un dragón ama tener un espacio propio. Un tesoro propio. ¿Un reino que está en ruinas podría darles eso?- Un golpe muy bajo para el ego del rubio. El chico nuevamente gruñó con desdén. - Los cazadores buscan los huevos, no son tan idiotas como para meterse con la madre. Los venden en el mercado usualmente pero, hay alguien en particular que los deseaba con ansias. Un Rey en el reino de los Todoroki tiene especial afición por su especie, alteza. Contrató a los mejores cazadores y todos los huevos que han encontrado, han nacido en el palacio. Lo consideran...-

- Su nido.- terminó de decir el chico. ____ lo miró por unos instantes sorprendida. Pensaba que él no le prestaba atención hasta su interrupción. Ella asintió con la cabeza.

- A partir de ahí no es tan difícil "domarlos". No sé si los llegó a utilizar en contra del reino de Althea pero...-

- ¿Cómo sabes esa información?- 

- Yo...me ofrecieron ser una cazadora pero me negué. Después de todo soy una bruja. Cualquier movimiento de ese tipo significaría entrar en guerra...otra vez.- se excusó la chica. 

- ¿Te ofrecieron ser una cazadora y te negaste?- preguntó el chico desconfiado. 

- Aunque parezca imposible querido príncipe sí, me negué.- El rubio gruñó irritado al escuchar el pequeño apodo.  - Poco tiempo después los demonios me capturaron y como prisionera es que llegue aquí.- El rubio miraba a la bruja con desdén analizando cada facción de su rostro en busca de algún gesto que la delatara en su mentira pero era en vano.  - Si quiere recuperar lo que antes era suyo...-

- ¿A ti en qué te concierne, bruja?- gritó el rubio - Lo que pasa en mi reino es asunto mío en cambio tú y tú maldita especie se pueden ir a la mierda porque ustedes fueron los miserables que ocasionaron la destrucción de mi pueblo.- 

-¡ Y seguirá esta destrucción hacia su pueblo si no escucha lo que digo! ¡Los humanos usan a los dragones para su beneficio, para ganar sus guerras y estas guerras desencadenarán la destrucción de todo! -