CHOI YEONJUN - YeonGyu -

CAPÍTULO 1

La única persona que no siente amor por nadie nació un viernes del año 936 durante la fundación de la dinastía Goryeo, un hijo amado y querido, proveniente de una familia bien posicionada, no le faltaba nada.

Creció como un niño reconocido por su inteligencia, muchos llegaban a sus padres ofreciendo a sus hijas para casarse en el futuro, pero a él no le interesaba eso, el solo quería pasar su tiempo junto a la música.

Solía sentarse junto al río y tocar el gayageum durante horas, él afirmaba que podía pasar el día entero si se lo permitían.

A pesar de su enorme pasión y su indiferencia al casamiento llegó una oferta que sus padres no pudieron rechazar.

El emperador al enterarse de que había un hombre que muchas familias codiciaban decidió que la única que podría casarse con él sería su hija, la princesa Nakrang.

El pobre chico fue obligado a casarse a la corta edad de 19 años, aun así, nunca se atrevió a tocar a aquella bella mujer, pero dos años después de ese matrimonio se les ordenó a ambos concebir un heredero.

El pobre chico devastado por la vida que llevaba regresó una vez más aquel arroyo para tocar el gayageum una vez más.

Con todas sus fuerzas y con la inmensa pasión que sentía por su instrumento, pido un deseo.

—Quiero tocar para siempre.

Una hermosa mujer brotó del agua y se acercó a él.

Su belleza era tanta que podría tentar a cualquier hombre a caer ante la perdición del amor, pero no para él, porque ni siquiera podía lograr acelerar su corazón o tan siquiera hacerlo sentir nervioso.

—¿Quién es usted? —pregunto de inmediato.

—Soy quien concederá tu deseo—respondió con una voz tan tenue y armónica—. No importó cuantas veces te tente tu nunca caíste—menciono orgullosa—. Ni siquiera eres capaz de amar a tu propia familia—las palabras eran crudas, pero no lo afectaban en lo más mínimo—. Lo más cercano al amor que lograste sentir fue hacia ese instrumento y su música, por eso te dejaré vivir eternamente, rodeado de esos sonidos.

El chico no podía estar más emocionado por las palabras que escuchaba—. ¡Muchas gracias!

Cuando estaba a punto de marcharse para contarle a su familia lo que pasaba la mujer habló de nuevo—. Eso no significa que ya no pondré obstáculos en tu camino—sin embargo, a él no pudieron importarle menos esas palabras.

Cuando contó a todos sobre su experiencia, nadie le creyó, incluso lo tomaron por loco, pero tras el pasar de los años lucía tan joven que incluso el emperador le exigió saber el secreto de esa juventud, sin embargo, después de escuchar la historia, lo llamó farsante y estuvo a punto de apresarlo, más él chico se le ocurrió un brillante plan.

Inventó un remedio que mantenía la juventud para el rey, que este solo funciono a base de mentiras, nadie se atrevía a decir que no era joven y él mismo comenzó a creer que había dejado de envejecer hasta su muerte.

Cuando se enteraron de su inmortalidad muchos propusieron a sus hijas para tener hijos que fuesen iguales a él y había muchas peticiones más raras cada vez.

Pero todas fueron negadas.

Con el tiempo sus padres fallecieron, al igual que sus hermanos y la persona a quien alguna vez llamó esposa.

El dolor de dejarlos era grande, pero no tan doloroso gracias a la falta de amor.

Año tras año aquel chico comenzó a prosperar a través de su inteligencia. Todo marchaba muy bien en su vida.

Mantenía un perfil bajo, no se encontraba registrado en ningún lado, ni siquiera tenía un nombre, pero tenía compañías a su cargo y era alguien sumamente feliz con su vida actual.

Aunque todo se salió de control cuando decidió visitar una de sus tiendas de vinilos, se encontraba en Taejeon-dong, era una de las menos frecuentes, su intención era saber cuál era el problema.

Cuando entró a la tienda, encontró el problema.

Evidentemente él chico que sostenía la guitarra eléctrica y fingía tocarla era quien se supone debía estar en el mostrador atendiendo clientes y no robando lo que estaba en la tienda.

Toda su vida estaba en orden hasta que llegó la época de los 60s y conoció a Choi Beomgyu, una persona que estaba tan fascinado con la música como él.

Y_E_O_N_G_Y_U