Cosa de locos

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Danielle daba vueltas en la sala alisando su flequillo con nerviosismo. Aquello era descabellado ¿cómo podía ser posible? La chica felina le había contado lo que sabía, incluyendo el deseo, cosa que Danielle no terminaba de asimilar ¿Por qué su deseo no se cumplió el de su gata si?

-No, no, no, esto...- miró a la castaña que la observaba atentamente -Esto es un sueño, si, estoy soñando. Cerraré los ojos y cuando los abra todo se habrá ido- pero al abrirlos se topó con los ojos felinos a pocos centímetros, fijos en ella.

-¿Ya vas a besarme?

La pregunta de la castaña sorprendió a la australiana quién en un intento de huir tropezó con la pequeña mesita frente al sofá,cayendo sobre su trasero

-¡Mierda!- la australiana hizo una mueca de dolor intentando incorporarse, todo bajo la atención de la más baja.

La castaña amplió los ojos preocupada al verla en el suelo

-¿Te caiste?

-¡No, es que me gusta golpearme el culo con el suelo!- gruñó entre dientes

-Oh...¡Ok!- Haerin volvió a sonreír tranquila como si esa respuesta hubiera bastado para saber que la australiana se encontraba bien

Danielle la miró disgustada. ¿Encerio no entiende el sarcasmo?. Pero al instante se golpeó mentalmente. Obvio no Danielle, es un gato, no entiende de cosas humanas.

-¿Por qué has dicho eso?- hizo una pausa y continúo al notar la confusión de los ojos felinos -Lo del beso...- no pudo evitar desviar la mirada al decir lo último

Los ojos de la castaña brillaron con emoción

-Es lo que quiero. Los humanos lo hacen y ahora soy una humana- explicó y ladeó la cabeza confundida -¿O debo besarte yo?

Las mejillas de la australiana entrojecieron, aquella mirada felina comenzaba a ponerla nerviosa

-Yo... Eso no funciona así Eri, no puedes andar ahí besando a la gente solo por ser humana- explicó ya de pie acariciando su retaguardia, sin duda no podrá sentarse un par de días -No funciona así...

-No quiero besar a todos los humanos... Solo quiero besarte a ti

¡Mierda, mierda, mierda!.
Todo esto estaba siendo una locura para la más alta. ¿Pero entonces, por qué mi corazón está latiendo cómo si fuese a salir de mi pecho?. Tragó en seco sin apartar los ojos de la chica frente a ella. ¿Joder, y por qué no paras de ver sus labios?. ¡Maldición, Danielle Marsh, aparta la mirada! Con algo de dificultad logró subir a sus ojos; No sabía que era peor, si ver sus bonitos labios o su penetrante mirada felina.

-No Eri, no puedes querer algo así, eres una gata y yo una humana

Eri frunció el ceño y negó en desacuerdo. Sus mejillas se inflaron dándole un aspecto infantil. Por su puesto un momento Danielle quiso pellizcar esas bonitas mejillas. ¡Por dios, es tan mona!. Agitó su cabeza en negación. Vamos Danielle, concéntrate.

-¡No es cierto, ahora soy humana como tú!- dió un pisotón cruzándose de brazos como niña malcriada en plena rabieta.

¡Aww, ternurita!. Danielle sonrió. Cualquier miedo que sintió por aquella extraña locura había desaparecido.

Su móvil comenzó a sonar sacándola de su embelesamiento y maldijo al ver el nombre.  Mierda, el trabajo. Con todo el asunto de Eri olvidó ir a la agencia

-¡H-Hola Lia!

Las facciones de la castaña se tensaron al escuchar ese nombre y Danielle tragó fuerte al notarlo. La mirada dulce de la chica felina había desaparecido por una realmente intimidante

-¿Danielle? ¿Está todo bien?

La pequeña castaña estaba atenta a la voz al otro lado de la línea. Agradeció haber conversado su audición de felina, porque sin duda no hubiera podido escuchar la charla telefónica con un oído humano

-Yo... Si bueno, eso creo- respondió la australiana un tanto distraída, mirando de reojo a la castaña quien no quitaba  los ojos de encima -amanecí un poco indispuesta en realidad, hoy ¿puedes hacerte cargo?

-Cualquier cosa por tí Dani

-¿Dani?- la castaña hizo crujir sus dientes. Esa sensación extraña de enojo y posesión volvía a invadirla

Danielle notó la acción de la castaña y tomó un poco de distancia, parecía que en cualquier momento se le lanzaría encima y no de un modo cariñoso

-Gracias, Jisu, nos vemos mañana en la agencia

-Sabes que lo hago con gusto. No te preocupes por nada, cuidaré bien de tu empresa... Que te mejores Dani

Al terminar la llamada vió a la castaña darse media vuelta y desaparecer por el pasillo dando grandes zancadas.

¿Qué le he ha pasado?. Danielle no entendía su reacción.

Escuchó el portazo y supuso que estaba en la habitación. Bueno, así tendré un momento a solas. Aprovechó la oportunidad para hacer una llamada, todo sin apartar la mirada del pasillo por si la felina volvía a aparecer. ¿Se enojaría de nuevo?

Comenzó a repicar y rogó por qué su amiga estuviese suficientemente desocupada como para contestar. Miró el reloj de pared, y sabía que por la hora la coreana debía estar pasando consulta

-Vamos Kim, contesta...-
Susurró suplicante

Después de un par de repiques finalmente la otra pelinegra contestó.

-Manoban, espero que sea importante, la señora Sara está en crisis de...

-Minji, necesito que vengas en cuanto te desocupes- soltó las palabras rápidamente sin dejarla terminar

-¿Ocurre algo Danielle, estas bien?- la voz de Minji sonó preocupada esta vez

-Necesito una psicóloga, creo que ya me volví loca... Y he escuchado decir que Kim Minji es la mejor tratando con ellos

-Danielle, deja tus alagos para luego- guardó un segundo de silencio y suspiró -Dame media hora, necesito resolver esto, espero que sea importante

-Creeme Min, lo es

🎄★

Holaaa
Cómo están?

Hubieron unos cambios en la historia, puede que algunos los noten. Cambié las edades por si se pueden dar cuenta (Cap. 1)
La verdad no sé si ustedes ven el cambio, yo si, si no se cambió ps ya q
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Sé que actualicé muy tarde

No tuve mucho tiempo ya que estuve ayudando a organizar todo para la cena de la noche

Y ps feliz noche buena; navidad para las doce

Si es q me alcanza el poco tiempo hasta subo un capítulo más tarde (es muy poco probable pero haré mi esfuerzo)

Y ps otra vez feliz navidad😺

★Bai★
🎄

Me enamoré de mi gata ••Daerin♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora