Le prince et chevalier (Freminet x Mika)

Cap. 16

Cuando llegó a casa se vió sorprendido por el flash de una cámara. Frente a Freminet se encontraba un chica que rara vez veía pero cuya existencia conocía. Ella era Charlotte miembro del club de periodismo, constantemente perseguía a Lyney y a Lynette por esto supuso que ese era el motivo de que se encontrara en su casa.

－ ¿Es verdad lo que me contaron? － Empezó rápidamente con sus preguntas － ¿Estás enamorado? ¿De quién? ¿Cuándo te vas a confesar? ¿Cómo lo harás?

－ B- bueno... Y- yo... － No supo que decir, tantas preguntas al mismo tiempo, tampoco quería revelar nada respecto a aquello, mucho menos a un miembro del club de periodismo, no quería salir en el periódico escolar － ¿Cómo sabes?

－ Eh... La profesora Navia preguntó a cada uno de los alumnos de su clase, yo incluida, cómo podría uno confesarse － Dijo algo risueña － Ella ya tiene pareja así que me pareció raro, de pura casualidad me la encontré de camino a casa y me lo dijo todo.

－ Ay － No podía culpar a Navia, ella sólo quería ayudar, pero definitivamente se arrepentía de haberle preguntado.

－ ¿Y...? － Miró expectante.

－ No tengo nada que decir, vete por favor － Pidió incómodo － No quiero salir en ninguna noticia.

Charlotte se mostró decepcionada, pero no se rendiría tan fácilmente, al final pasó al menos unas 3 horas enteras en la casa, yendo de un lugar a otro y haciendo preguntas que no serían respondidas. Cuando finalmente cedió Freminet pudo descansar tranquilo.

Pero, el día que pronto llegaría no sería el más tranquilo, puesto que habría sido citado por Collei. Esta se veía especialmente extraña, ambos se encontraban solos detrás de la escuela.

－ ¿Por qué quieres confesarte? Él posiblemente te rechace, y no querrá continuar siendo tu amigo － Su voz sonaba seria, era totalmente distinta a la emotiva Collei que conocía － ¿Qué es lo que te gusta tanto de él siquiera?

No supo que responder.

－ Lo digo por tu bien － Continuó － He conocido a alguien como tú, no quiero volver a ver una situación así, no quiero verte llorar.

－ ¿Estás preocupada por mi? － Preguntó, Collei asintió soltando un pequeño sollozo.

Sus delicadas mejillas ahora se encontraban empapadas en sus lágrimas, pese a intentar contener sus sollozos solamente la llevó a llorar incluso más. Quería aceptarlo, lo idiota y mala que era ella. Había sucedido hace ya un tiempo.

Cuando Sucrose terminó con Mika, se dirigió hacía su amiga Collei. Poco después de empezar la relación con aquel chico, le comentó entre lamentos la verdad, su amiga la miró con pena y ahora la abrazaba con suavidad contra su pecho. Una y otra vez, también cuando Albedo la rechazo. Tenía que confesar que estaba perdidamente enamorada de ella desde hace tanto, ¿se estaría aprovechando de su tristeza para poder sentir su calidez? Le gustaba abrazarla, sujetar sus manos, susurrarle palabras de aliento y decirle que ellos no la merecían. Debía de estar mal, debía de ser la cruel villana de aquellas novelas románticas.

Solo quería poder ser protagonista de su propia, pura e inocente historia de amor. Haberse enamorado de Freminet era tal vez solo un intento desesperado de escapar de aquello, quería alejarse de Sucrose, era ella quien no merecía a tal tierna e inocente muchacha. Si Freminet era rechazado ¿también se terminaría aprovechando de él?

－ ¡Freminet! Conque aquí estabas － Mika irrumpió en el lugar ingenuamente sin intentar leer antes la situación, rápidamente se arrepintió al ver la escena, más allá de lo que hubiera sucedido, claramente se hizo una idea errónea al ver a ambos chicos tras la escuela, totalmente solos y además de a Collei llorar desconsoladamente － ¿Puedo preguntar?

－ No － Respondió la chica quien se acerco repentinamente a él para sujetar sus hombros de manera brusca － Se bien lo buen chico que eres, cuida bien de Freminet.

Dejándolo totalmente confundido Collei salió corriendo. Miró al contrario como en busca de una respuesta y este solo lo miró también extrañado.

Ambos se miraron el uno al otro en total silencio. La situación se estaba volviendo algo incomoda así que Mika decidió por hablar.

－ ¿Se te confesó y la rechazaste usándome de excusa? － Preguntó de manera honesta según lo que asumió de la situación.

－ ¿Qué? ¡No! ¡No te hagas la idea equivocada! No hay modo de que le guste a Collei － Dijo casi riendo, para luego continuar con un tono sereno pero algo contento － Pero es posible que tal vez me vea como un amigo.

－ ¿Tienes una nueva amiga? － Preguntó casi como un elogio － Vas por buen camino.

－ Gracias － Sonrió alegremente.

Pese a todo, había algo que Mika aún no comprendía, y bueno, aparte de los llantos de Collei, se refería a las palabras de esta misma. ¿Qué querían decir? Tal vez era sólo un "sé lo buen amigo que eres, tratalo bien ya que eres su amigo", pero también podría ser un "a él le gustas, se un buen novio". Seguro y lo estaba sobrepensando, pero le gustaba pensar que era la segunda.

－ Por cierto － Freminet continuó － Si escribiera un cuento donde eres un personaje, ¿te gustaría ser un caballero?

－ ¿Eh? Supongo que sí － Respondió algo confundido － ¿Estás escribiendo una especie de fanfiction de la escuela o algo?

－ ¡Es solo un cuento! － Respondió algo avergonzado.

－ Espero con ansias poder leerlo en ese caso － Le dijo con una sonrisa － ¿Lo publicaras con el periódico escolar?

－ No quiero hacerlo publico, solo será para nosotros dos... ¿Sí?

－ ¿Sí? Eh. Sí.

Confundió un poco a Mika, pero también lo emocionó, Freminet escribiera un cuento solo para él, tenía ansias de leerlo pronto.

－ ¿Está bien si te lo entrego mañana? － Preguntó mientras jugaba nervioso con sus dedos － En este mismo lugar... ¿Te molesta?

－ ... － Tal vez se estaría haciendo una idea errónea otra vez, pero, era detrás de la escuela, el clásico para las confesiones － ¡No me molesta!