𓆤
Doy un respingo al sentir la temperatura del agua rozando mi dedo índice. Me soplo el mismo y dejo de pulsar el botón de la cafetera que hay dentro de mi despacho para que el agua deje de caer.
¿Cómo demonios ha llegado a alcanzar mi dedo? La máquina está diseñada para que no tenga que sujetar la taza mientras se llena de agua. Enfoco mi atención en la máquina y descubro que he estado sujetando la taza todo este tiempo y la suelto. He vuelto a distraerme. Suspiro. ¿Qué coño voy a hacer conmigo misma? No puedo seguir viviendo así.
Una vez más, apenas consigo conciliar el sueño por razones completamente distintas. Mi razón para no dormir tiene nombre y apellido... tiene más que eso, de hecho; tiene una sonrisa de infarto y un corazón de dinamita. Sólo pensar en su nombre hace que mi piel sienta una descarga de electricidad, no obstante, a su vez me devuelve a aquella noche y a la forma en que me marché por lo que también me provoca una sensación agria en la boca.
Después de preguntarme si lo que habíamos hecho había sucedido de verdad, su cuerpo se tensó. Hubo un evidente distanciamiento en su lenguaje corporal y en nuestro alrededor. Recuerdo haber preguntado qué quería decir puesto que percibía remordimiento en su voz, a lo que él no tardó en confirmar que sólo estaba asombrado y luego me besó. Hasta el tacto de sus labios era distinto.
Era obvio que se arrepentía de todo, a pesar de que yo desconocía sus motivos con precisión.
Así que, cuando ya no se encontraba dentro de mí, sino tumbado a mi lado, sin tocarme, debo señalar, hice lo que haría cualquier mujer: le pregunté si quería agua, que yo se la traería, me vestí y me marché. Quizá no cualquiera, pero si una con tantos traumas como yo. El sólo pensar que se arrepiente de lo que hicimos, cuando para mí fue mucho más que sólo sexo, me corta la piel por dentro como pequeños navajazos. Sobre todo porque se relaciona con mi hermana. Los siguientes dos días, mi mente estuvo plagada de preguntas que nunca tendrán respuesta; ''¿es sólo culpa o se arrepiente porque no fui lo lo bastante buena para él?''.
Lo último que escuché antes de que se cerraran las puertas del ascensor, fue cómo me llamaba. No lo he vuelto a ver desde aquel día. Ha pasado una semana y dos días. Lo que no tenía previsto es que fuera tan perseverante en su empeño de contactarme; me ha enviado al rededor de cien mensajes de texto, ha dejado tantos mensajes de voz que se me ha saturado el buzón, trató verme en la oficina, me envió correos electrónicos y hasta una carta que ni siquiera me molesté en leer.
Si tuviese que adivinar, diría que la única razón por la que no se ha molestado en localizarme en mi propio apartamento es Roman. Se ha quedado a dormir allí con más frecuencia, ese semana ha estado conmigo del todo y se ha mostrado más cariñoso que nunca, ignorando por completo que ya no tiene esposa. Me gusta seguirle el juego a veces y fingir que todo esta perdonado, pero él no ha sacado a relucir el hecho de que aun dormimos en habitaciones diferentes y no tenemos ningún tipo de contacto físico. Es como un matrimonio de papel. Basta un pequeño soplo para que la realización de que su padre siempre ha tenido razón sobre él se le venga encima como un castillo de naipes.
―¡Hola, Aubree! ¿Te encuentras bien? ―Sacudo la cabeza y alzo los ojos para encontrarme a Olga, nuestra recepcionista, que se encuentra frente a mí con la mano en el pomo de la puerta y medio cuerpo haciendo acto de presencia. Lleva un traje rojo brillante a juego con sus labios aún más rojos y su pelo rizado color sandía.
―Hola, buenos días. Sí, claro. Estoy genial, ¿por qué?
―Ninguna razón en concreto, es que... he estado llamando a tu puerta durante un minuto antes de atreverme a entrar. Te ves algo distraída. ¿Necesitas algo? ―Pregunta con esa voz suya tan dulce como un bombón.
![](https://img.wattpad.com/cover/340698454-288-k515434.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Intercambio
RomanceAubree Bain es una mujer exitosa de veintinueve años que sigue siendo una soñadora de corazón y, a veces, un tanto ingenua. Es inteligente y le encanta lo que hace. Cree que su vida es perfecta, salvo por algunos desacuerdos con su marido, pero eso...