John Dory x OC¡!

The beginning

Ahí me encontraba, colgada de unas lianas a varios metros del suelo que hasta vértigo me daba, a mi costado de encontraba Moony, se veía más tranquila que antes a decir verdad. Ya hace 1 hora empeze a perder las esperanzas de que alguien escuché mis gritos, solo me quedaba esperar a que alguna liana deje de apretarme fuertemente.

—Soy una idiota—Empeze a pensar en voz alta, total nadie me iba a escuchar—Por qué siempre me meto en estas cosas? Se supone que a la séptima debía aprender—

—Yo creo que la décima es la definitiva, o me equivoco?—

Una voz cerca se escuchó, entre en guardia al no saber de dónde venía.

—Que hace una niña por estos lugares?—Al fin se digno a mostrarse, era un troll más alto que yo, era celeste verdoso y tenía unas goggles grandes.

—Queti

—Queti?

—Quetimporta— Rei internamente al ver que se quedó pensando—Bueno, si no es tanta molestia, le importaría ayudarme a bajar de acá? Creo que toda mi sangre se fue a mi cabeza—

No dijo nada pero comenzó a acercarse a las lianas que me tenían atrapado y con una navaja las corto como papel.Suspiré aliviado de porfin poder moverme y comencé a cortar las lianas que tenían atrapada a mi Moony.

—Un gracias mínimo, no?

Voltee y le di las gracias para seguir caminando en otra dirección, no tengo ganas de hacer amistades ahora mismo. Pero parece que no le importo mi lenguaje corporal o es tan idiota como para seguirme.

—Como te llamas? No acepto un queti como respuesta

—Me llamo Kalisaac, feliz?

—Mucho, cuéntame de tí, porqué estás en estos bosques?

—No me vas a dejar hasta que te responda, no?

El simplemente agito la cabeza en señal de "no", es un idiota.

—Simplemente me gusta, no tengo un lugar que volver después de todo.

Empezamos a hablar, resulta que su nombre es John Dory y es casi 3 años mayor que yo, estamos en las mismas ambos al parecer. Sigo pensando que es un idiota, aún si me sigue mirando con esa bonita sonrisa. Siento su mirada en mi cada momento pero al voltear de hace el desentendido y mira a otro lado, la falta de afecto femenino se nota a kilómetros...