Tra corone👑🗡️ [SeungJin]

Uno👑🗡️

El chico de hebras oscuras caminó con paso firme por los pasillos, recibiendo las curiosas miradas de los presentes en la zona.

Los movimientos de sus pies se detuvieron frente a un gran portal de vidrios coloreados de suaves tonalidades rosas y magentas, además de una enorme cartelera que indicaba la sala de reuniones de la realeza.

Abandonó un par de golpes sobre la cristalera que lo separaba de ese espacio, siendo el sonido ensordecedor del silencio lo que le recibió. Repitió el acto con confusión, hasta que una voz tras él llamó su atención.

- Los señores Hwang no se encuentran actualmente, están en el extranjero.

- Pero ellos me dijeron que estarían aquí para mí llegada.

- Pues no están. Es una pena.

El chico observó a la rubia que lo miraba con superioridad, lanzando a la misma una mueca de odio mientras dirigía sus manos a sus bolsillos.

Agarró el papel que se escondía en el fondo del mismo y amenazó con dejarlo ver, aunque la joven frente a él fue más rápida y rió con fuerza mientras mostraba un papel.

- Buena suerte con esto. Pero no vas a conseguir el puesto. Es mío.

- Eso ya lo veremos.

- Eres interesante. Nunca antes han intentado quitarme mi lugar.

- Para todo hay una primera vez, ¿no?

- Ya, bueno; no será en este trabajo.

Antes de poder lanzar otra de sus frases hirientes, los cristales rugieron cuando la puerta fue abierta, dejando ver a una mujer esbelta, de cabello oscuro y ojos claros. Se podía ver con claridad la reciente aplicación de tinte sobre las zonas más claras de sus cabellos, dando a entender sus signos de edad.

- Buenos días - anunció la señora en cuestión -, ¿quién de vosotros es Kim Seungmin?

- Yo, señorita.

La mujer sonrió con júbilo antes de terminar de abrir las puertas y permitir la entrada del joven. Seungmin hizo acto de presencia dentro de esas cuatro paredes, observando con detenimiento a los presentes que se mantenían con sus traseros sobre los asientos.

Imitó el acto del resto de personas y tomó asiento donde se le fue asignado, escuchando los murmullos de esos personajes externos que trataban de hacerlo sentir intimidado.

<<También es coreano. Debe saber las normas muy bien>>

<<Pero no parece de Seúl. No creo que esté a la altura>>

<<Yo creo que es gay>>

<<Uff, espero que no. Se ve que tiene una polla muy buena>>

<<¿Será lo suficientemente bueno para el príncipe Hwang?>>

<<Parece una puta>>

- Buenos días a todos - un hombre de edad media llamó la atención de todos los presentes -. Como imagino que sabréis, os he convocado nuevamente aquí para escoger al siguiente asistente de nuestro príncipe. Para ello, hemos entrevistado a algunas personas dispuestas a trabajar en este puesto como primer paso de nuestra ayuda para el príncipe. A continuación, como segundo y último paso, procederemos a realizar una entrevista más profunda a cada uno de los presentes que pasaron el primer asalto. Junto a los jefes de cada departamento de distribución de tareas y los reyes, podemos dar comienzo a la entrevista. Por favor, quién esté interesado en preguntar qué alce su brazo; se le dará el turno de palabra según el orden y solo se admitirá que responda a las preguntas cordiales.