El Reino de los Devas, ese lugar tan fascinante en la mitología budista. Según esta creencia, es uno de los Seis Reinos de Existencia por los cuales la conciencia deambula en un ciclo interminable. Y resulta que este reino es todo un paraíso de éxtasis, gozo y alegría. ¡Qué buena suerte tienen esos devas!
Ahora, cabe mencionar que aunque a menudo se traduce la palabra "devas" como "dioses", no son seres todopoderosos ni omniscientes. De hecho, ni siquiera son inmortales, aunque sí gozan de vidas extremadamente largas. ¡Imagínate vivir tanto tiempo! ¿Quién necesita la inmortalidad cuando tienes una vida eterna de placeres?
Según el budismo, estos devas habitan diferentes "cielos" en función de sus características y "poderes". Así que dependiendo de su karma y sus acciones pasadas, pueden disfrutar de múltiples placeres como recompensa. Pero, claro, aún no han alcanzado la iluminación, lo cual es un pequeño detalle. Parece que todavía están atrapados en el ciclo del samsara y sujetos a nuevos renacimientos. ¡Vaya fastidio!
Por supuesto, los devas también tienen que lidiar con el hecho de que, a pesar de su estancia en este reino paradisíaco, no pueden evitar el constante cambio y la impermanencia del mundo. Así que si quieren librarse de la necesidad de renacer y alcanzar el nirvana, deben seguir el camino señalado por el Buda. Resulta que el Buda es el maestro supremo, tanto de los hombres como de los dioses. No me quiero imaginar las clases que debe impartir.
Pero aquí viene la parte divertida. Aunque el Reino de los Devas se considera un "paraíso" donde no hay sufrimiento, resulta que ese mismo gozo extremo de los placeres dificulta enormemente (o generalmente hace imposible) seguir el camino hacia la iluminación. Parece que es difícil resistirse a las delicias de este reino y mantenerse enfocado en la búsqueda de la iluminación.
Es por eso que el Reino humano se destaca de los demás. Aquí es donde se encuentra la posibilidad de alcanzar la iluminación plena o el nirvana. Después de todo, en este reino experimentamos tanto alegría como sufrimiento, y nuestras necesidades nos empujan a buscar el camino hacia la iluminación. Así que felicidades a nosotros, los humanos, por tener la oportunidad de alcanzar la verdadera iluminación mientras nos debatimos entre la alegría y el sufrimiento.
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En Busca Del Sentido: Reflexiones Sobre El Destino Y La Existencia
Espiritual¡Atención a todos los que se sienten perdidos en esta vida miserable y sin sentido! Si alguna vez te has preguntado si hay más en la vida que simplemente existir y pagar facturas, entonces este libro puede ser justo lo que necesitas... o tal vez no...
