Capítulo 1.

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Narra Malú.
El día que tanto temía, finalmente ha llegado. La incertidumbre de enfrentarme a un nuevo capítulo del pasado que no acabó de buena manera, me está matando. Y sí, ese capítulo trata del gran pianista al cual España entera admira, el queridísimo Pablo López. Después de tantos años sin contacto, exactamente unos 6 años, desde 2017, el destino ha decidido volver a encontrarnos en el ensayo general para la gala de Nochevieja 2024. Tengo sentimientos encontrados de felicidad por recordar los buenos momentos y de temor por el hecho de echar la vista atrás y ver cómo todo terminó. Sinceramente, tengo una tormenta en mi interior que me hace dudar de mí misma y de mis acciones en el día de hoy.

Aparqué mi coche frente a los edificios de Atresmedia, antes de cruzar la puerta principal, por la que todos los invitados entran para la sesión de vestimenta y maquillaje, me detuve y decidí hacer una llamada al padre de mi hija, Iván. Buscaba el momento perfecto de conexión familiar para hablar con Lucía, mi pequeña de 3 años, pero lo que obtuve fue una negación rotunda por parte de su padre. Esto desencadenó un torbellino de nervios en mí. Escuchar a mi hija llorar por los rincones de la casa deseando hablar conmigo, hizo que mis ganas de llorar aumentaran. Seguí insistiendo en hablar con ella, pero la respuesta de mi reciente ex novio fue colgar el teléfono y ese sonido retumbó en los más profundo de mi pecho.

No estaba en condiciones de entrar en aquel edificio con numerosos conocidos, por lo que me sumergí en un mar de lágrimas durante 15 largos minutos. La soledad, la impotencia de no poder hablar con mi niña y el peso del pasado con cierta persona me estaban destrozando. De un instante a otro, sentí una caricia en mi hombro y una voz familiar acercándose a mi.

+ Malú, vamos a empezar ya, - dijo López sin contemplar mi cara a rebosar de lágrimas.

Al darme la vuelta, la cara del chico se descompuso por completo.

+ Ohhh - balbuceó sin dar crédito a lo que estaba viendo - yo...yo...yo lo siento Malú, no sabía que iba a encontrarte así.

+ ¿Qué te pasa?¿Estás bien? - continuó acariciándome el hombro.

Sin ser consciente de lo que estaba pasando, aparté su brazo de mi hombro de malas maneras y empecé a sentirme agobiada sin razón alguna.

- ¡Pablo, vete necesito estar sola! ¡fuera! - grité con ansias mientras observaba su cara de asombro al haberle gritado de manera arrogante.

Hasta que el sol deje de brillar - PalúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora