SOLO MIO (JEFFCODE)

2.4

La mañana se hizo presente una vez más, Code no pudo dormir en toda la noche pero aún así mostró su mejor cara, se levanto temprano, se dió largo baño, cubrió sus ojeras para que su padre no se preocupara, colocó su uniforme y preparo el desayunó de su padre, pronto su padre se unió a él, comieron y él hombre le explicó el porqué los desconocidos de la noche anterior habían ido, su padre se veía ilusionado y Code sonrió felicitando a su padre, finalmente los dos salieron de casa rumbo a la universidad del más pequeño, otro de los grandes traumas que quedaron en Code tras su secuestro fue el miedo a estar solo en la calle, ese también era un trauma de su padre quién vivía con el miedo constante de que su hijo desapareciera de nuevo así que siempre lo llevaba y traía de la universidad

— Nos veremos en la tarde, estudia mucho hijo — Habló el hombre dejando a su hijo en la puerta de la universidad, Code solo se despidió con su mano e ingresó al lugar encontrándose ya con sus amigos así que se sentía tranquilo; el día fue bastante tranquilo para el menor a diferencia de su padre quién estaba teniendo un día bastante ajetreado, la cafetería estaba completamente llena y le faltaban manos que le ayudarán, fue para ese momento que Jeff y sus tres escoltas llegaron al lugar

— ¿Como están? Me avergüenza decir esto pero, estoy bastante ocupado así que no creó que pueda atenderlos hoy — El hombre se veía avergonzado pero Jeff solo sonrió

— Creó que le faltan empleados aquí ¿Quiere que le ayudemos un poco?— Pregunto Jeff sonriendo amablemente

— ¿Como creen? No me tomaría el atrevimiento de pedirles que me sirvan de meseros— El adulto se negó de inmediato pero en cuestión de minutos, Jeff y sus hombres estaban atendiendo mesas, el lugar estaba bastante lleno y era claro que el mayor no podría con todo solo, el tiempo se pasó realmente rápido, era increíble pero Jeff estaba bastante emocionado con el trabajo que hacía; así la tarde llegó, el adulto miró la hora y ya iba tarde a recoger a su hijo

— Dios, Code debe estar esperándome — Dijo el hombre ahora preocupado por su hijo

— Si desea yo lo puedo ir a recoger — Se ofreció Jeff al ver que el hombre aún no termina de hacer sus cuentas

— No quiero incomodar— Respondió el mayor y Jeff negó de inmediato con una sonrisa en el rostro

— No me incomoda en absoluto — Afirmó Jeff transmitiendo confianza en el adulto que estaba por decirle que si hasta que su teléfono sonó

— Hola? ... Oh señor ¿Como esta? .... Esta bien, no lleguen muy tarde — Con lo último el adulto corto la llamada y observo a Jeff una vez más

— Muchas gracias por su ofrecimiento pero un amigo lo traerá a casa— Dijo el hombre calidamente y volvió a sus cuentas sin notar que el rostro de Jeff había cambiado a uno completamente serio ¿Quién era ese imbécil? Y ¿Por qué era tan cercano que incluso el padre de Barcode no se opuso a que se quedara con él? Las preguntas y los celos le carcomian pero mientras él moría de curiosidad, Code disfrutaba de un agradable momento en el parque

— Sigues siendo un bebé — Se quejaba el adulto que estaba con el menor al ver como su uniforme se manchaba de helado

— Oh P'Mile, deja de burlarte de mí — Respondió Code haciendo pucheros y causando que Mile se riera de él

— ¿Como has estado Barcode? —  Pregunto de repente Mile al menor y este bajó la mirada tratando de sonreír

— En realidad, aún no puedo dormir, a veces cuando me siento muy agotado tomó una pastilla y duermo pero en realidad no descanso, las pesadillas me atormentan horrible y al despertar estoy llorando, agotado, como si hubiese peleado una gran batalla, es horrible porque ni siquiera puedo recordar — Code se veía realmente agobiado por aquella situación y Mile no podía hacer mucho más que consolarlo, sabía que era difícil para el menor y más aún cuando vivía ocultándole a su padre aquella situación

— Deberías ir a terapia de nuevo — Sugirió el mayor y Code negó de inmediato

— Eso implicaría ir a Bangkok, primero es un gasto que no quiero que mi padre lleve encima y segundo, en verdad me da miedo la ciudad — Mile en verdad sentía mucha lastima por el menor, tener que vivir con traumas constantes y ni siquiera poder recordar el porque era algo realmente horrible

— Vamos, tu padre dijo que no llegáramos tarde— Mile cambio el tema de inmediato y el menor asintió, ya era tarde y su padre lo debería estar esperando así que solo subió al auto con Mile e iniciaron su recorrido a casa mientras que en el hogar el adulto terminaba sus cuentas y Jeff miraba el reloj

— Ya es tarde, deberíamos irnos ahora — Dijo Jeff un poco decepcionado al saber que no podría ver a Code ese día pero el adulto se negó a dejarlos ir

— Me ayudaron mucho hoy, por favor, quédense a comer, prepararé algo delicioso para todos — Habló el mayor sonriendo calidamente

— Oh, no queremos molestar — Respondió Jeff negando aunque esperaba que el mayor le suplicara y efectivamente así fue

— Por favor, insisto en que se queden a comer — Dijo el mayor de nuevo y entonces Jeff aceptó, finalmente cerraron la cafetería y subieron al apartamento donde se sentía un ambiente familiar y agradable, el mayor les platicaba de varias cosas mientras Jeff y sus hombres bebían café y se reían con las anécdotas del mayor, de repente el sonido del timbre resonó en la casa

— Debe ser Barcode— Dijo el mayor de todos sonriendo, se dispuso a quitar su delantal para ir a abrirle a su hijo pero entonces Jeff lo interrumpió

— No se preocupe, yo abriré por usted — Y si darle tiempo al adulto de hablar, Jeff bajó las escaleras y camino por en medio de la gran cafetería, se veía tranquilo pero por dentro estaba hecho una fiera, quería ver el rostro de la persona que estaba con Code y juro que lo mataría una vez supiera quien era, llegó a la puerta y sostuvo la perilla, suspiró pesado y luego abrió llevándose una gran sorpresa

— Detective Mile....— Fueron las palabras que articulo Jeff al ver a Mile al lado de Barcode, Mile por su parte observo con asombró a la persona que abría la puerta

— Señor Jeff...— Respondió Mile y la tensión en el lugar era notoria, definitivamente el mundo era pequeño