Capítulo 9

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Paso una semana desde que Xie Lian a tratado de ser más abierto de poco a poco que hasta el mismo Hua Cheng se emociono tanto que le pregunta cualquier cosa. Xie Lian hasta cierto punto se sofoco de las preguntas pero no podía negarle nada a Hua Cheng.

Xie Lian le está peinando el cabello del menor mientras que el menor anda con su libreta tachando las preguntas que le ha hecho al mayor.

-Bueno...- analizo las preguntas- ¿qué cosas suelen provocarte enojo con facilidad?

-Sería que traten injustamente a mis seres queridos y -emitió una risa tenue- que me despierten...

Hua Cheng no pudo evitar su sorpresa al escuchar aquellas palabras.

-¿En serio?

-Si...

El menor no pudo evitar recordar las veces que despertaba a Xie Lian con gran entusiasmo que hasta el mismo Xie Lian respondía de una manera tan alegre.

-Pero contigo es diferente -dijo Xie Lian- no me molesta que me despiertes.

En realidad si le molesta que le despierten y hasta a querido decirle algo Hua Cheng sin embargo una sonrisa siempre aparece del menor que el mayor solo seguía por aquella sonrisa y olvida su enojo.

-¡Me alegro!

Xie Lian dejó un momento el cepillo para moverme un poco el vendaje más parece que el vendaje quiere quedarse en su cuello.

-¿De nuevo?

-Si -soltó un suspiro- veo que le gusta bastante estar pegado a mi pero más en el cuello.

Al principio se espantaba al sentir algo moverse en su cuerpo que casi juro que lo estaban poseyendo hasta casi suplico a los cielos que aún no es su momento pero luego ve el vendaje que aparece en su brazo y ahí agradeció que fuera eso.

Y así todos los días aparece con el vendaje en diferentes partes de su cuerpo; muñecas, tobillos, pantorrillas, muslos, brazos, pecho y por último su cuello. Parece ser que su cuello le gusta bastante puesto que ahora se queda ahí sin siquiera moverse.

-¿Si le llamo Pegajoso?

-Jajaja, no creo que le guste Gege.

-Lo sé, pero nunca e sido bueno poniendo nombres.

-A mi me gusta el nombre que me pusiste.

Xie Lian agradeció muchísimo que Hua Cheng no puede ver su rostro sonrojado, esta tan avergonzado de recordar lo que le dijo sobre el significado de su nombre.

-¡¿Niños ya están?!

-¡Ahí vamos!

Termino de peinar el pelo de Hua Cheng, le hizo una hermosa trenza se siente orgulloso que por fin le salió ya que en el orfanato se la hacía muy chueca que el mismo Hua Cheng tuvo que mentir que le quedó bien bonito el peinado, agradece en lo más profundo de su corazón que no hería sus sentimientos.

Al salir de la habitación, el vendaje se aventó directamente en Mei NianQing...

-¡XIE LIAN!

El vendaje está cubriendo por completo el rostro de Mei NianQing que hasta el mismo Hua Cheng casi se ríe por ver aquella escena.

-¡Juro que no fui!

Toda la mañana trataron de quitar el vendaje del rostro de Mei NianQing mientras que Mei NianQing ya recordó su razón por la cuál no quería tener hijos.

Hua Cheng hizo todos sus esfuerzos de no reír pero fue inútil al ver el rostro de Mei NianQing todo rojo que es posible por la ira o más que el vendaje le dejo marcas hasta tenía los ojos inflamados y los labios muy hinchados, no paro de echarse risa al ver esto.

HematófagosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora