Capítulo 16

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Mei NianQing llego al edificio que miro con repugnancia.

Soltó un gran suspiro junto con un deseo que sea solo una suposición que no sea coincidencia que se haya encontrado a Jun Wu.

《□□□》

Hua Cheng se despertó por el calor que hace que le costo mucho mover a Xie Lian que se hiciera un lado pero a la vez que no quería que se despertara era un reto muy difícil para él.

El mayor sintió como el menor movía y movía su brazo hasta que por fin pudo abrir los ojos un poco cuando miró que esta en la orilla de la cama mientras que el menor se encuentra pegado junto a la pared.

-Gege puedes moverte un poco, hace muchísimo calor.

-Mmm...-cerro los ojos.

El menor quiso llorar internamente cuando noto que no le iba ser caso es más hasta se junto el mayor más al menor.

-Gege por favor, hace mucho calor.

-Pero tengo frío...

Vio de mal humor a Xie Lian aún que cuando presenció una sonrisa por parte del mayor que haya le saco la lengua se percato que esta jugando con él.

Hua Cheng le encanta ver ese lado travieso de Xie Lian, se siente privilegiado de ver aquella faceta que desea ver más y más pero ahora lo que desea es que su Gege se separe para estar más fresco.

-Gege no juegues así conmigo.

El castaño se hizo un lado soltando una pequeña risa por su parte.

Ambos niños se quedaron en silencio, el mayor cerro los ojos de nuevo retomando el sueño al igual que él menor retomo el sueño con una sonrisa en sus labios.

Los niños se quedaron tan dormidos que inconscientemente sus cuerpos buscaban el calor del otro. Una vez que sintieron el calor del otro sus cuerpos se quedaron quietos sabiendo que si se juntan más, sus brazos van a abrazar la otra persona.

"Despierta Xie Lian"

Despertó agitado en el preciso momento de escuchar la voz de Ruoye con fuerza resonando en su mente una y otra vez.

-¿Qué pasa Ruoye?

Ruoye no se encontraba con él, se le hacía extraño de no tener a Ruoye pegado en su cuerpo.

La cocina se escuchan pasos al igual que se escucha golpes secos una y otra vez se escuchan golpes hasta que llego un punto que no llego a escuchar más aquellos golpes secos ni los pasos.

Mei NianQing nunca hace un sonido ni mucho menos se permite de escuchar su propia respiración con sólo la excusa de decir que no quiere molestar pero ahora es diferente se escucho pasos que sabe que no es de una persona si no de dos personas.

Sabe que el piso de la cocina rechina que hasta los tres evitan tocar esa parte del piso con el hecho de no escuchar ese molesto ruido. Ese molesto ruido se escucho más de una ocasión.

Un balde de agua fría le cayó que ni se molesto en buscar los guantes.

Lleva una semana tratando de controlar su habilidad y hasta cierto punto puede manejar pero aún teme hacer daño, esta vez no tiene miedo de hacer daño y menos cuando hay intrusos en la casa.

HematófagosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora