Violence

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-¡Oye, mojigata! - Caradoc Natale gritaba desde la otra calle a Rose.

Al verlo, la chica comenzó a caminar aún más rápido. Aquel gordo repugnante como Rose lo llamaba en secreto y con el cual no podia hacer nada al respeto por el estatus de la familia del chico.

El se pasaba los días acosandola o la mayoria de estos, la seguía en la escuela o cuando su chofer no iba por ella a la escuela camino a casa y cuando estaba sola le coqueteaba o trataba de tocarla, pero siempre pasaba algo y no sucedía.

-¡¿A dónde vas tan rápido?! - Sus pasos se escuchaban más cerca y eso la ponía aún más nerviosa.

¿Qué hago? ¿Corro, grito? Todavia estoy lejos de mi casa, Pensó Rose.

La mejor opcion o mas es ir a casa de Coriolanous, la cual quedaba mas cerca y despues de su reconciliacion era su unica opcion.

Apresuró el paso, el corazón le latía con fuerza, con mucha fuerza, sentía que se le salía. Tenía miedo, como siempre ante ese tipo de situaciones.
A veces el coraje de no defenderse ante los abusos de aquel grasoso chico le hacían arder el pecho.

-Te estoy hablando - Justo frente a la puerta del edificio Caradoc la alcanzó y la tomó de la muñeca con fuerza obligándola a voltear.

Los ojos de Rose lo miraron con terror y absoluta sumisión indeseada. Las constantes exigencias de si misma para ser perfecta o de como nadie la validaba en una sociedad de hombres poderosos la habían llevado a aceptar psicológicamente que podría ser violada y una chica buena no debía impedirlo porque la mujer era propiedad del hombre.
Pero eso era lo que quería la sociedad retrograda y superficial en la que vivia, ¿Rose también lo querría?

-Su...Sueltame - tartamudeó. Odiaba hacerlo, se sentía más débil de lo que ya era.

El chico la atrajo hacia el pero en un abrir y cerrar de ojos ella golpeo su ojo enterando parte de su anillo en el, asi mismo dandole unos minutos de ventaja para correr y entrar al edificio para rapidamente entrar a su hogar y Caradoc ser detenido por el Portero en la entrada.

- ¡Esto no se va a quedar asi! - Fue lo ultimo que escucho Rose al entrar rapidamente al elevador en donde comenzo a llorar en silencio y se abrazaba a si misma, aterrada pensando en las consecuencias que podrían pasar.

Sintiéndose culpable por lo que habia pasado ella nunca habia golpeado a alguien o simplemente se defendía de forma mas...sutil haciéndose pasar por una victima que necesitaba de proteccion masculina para que las cosas se resolvieran a su favor.

La manipulacion es una de las mejores armas, su unica arma en realidad.

Al entrar a el hogar de los Snow fue recibida por una de las sirvientas, la cual la dejo pasar. Coriolanous quien estaba sentado tomando el te y observando la ciudad desde la ventana al verla con lagrimas en los ojos corrio hacia ella y la hizo pasar a su habitacion.

Al entrar el se aseguro de consolarla, como si de un padre se tratase. Le insistio a la chica que le contara lo que habia sucedido. Por mas que Coriolanous se negara su corazon se llenaba de culpa y empatia al ver llorar a su....amiga, ¿Novia? en este estado. Y mas al escuchar con atencion sin decir una palabra y solo consolandola por varios minutos.

-Tienes que hacer algo, estuvo bien el golpearlo pero un cerdo como el no se va a detener -dijo Coriolanous detrás de ella - Es injusto.
Rose se dio vuelta y lo miró. Volvió a ser consciente de todos sus actos.

-No se cómo... - Susurró y suspiro cubriendo su rostro con sus delicadas manos.
Rose parecía en otro mundo, parecía ida de sí. Lo que pasaba era que estaba cayendo en un shock momentaneo de todo lo que hizo mal alguna vez en su vida.

-¡Si puedes!- Exclamó él, la tomó del brazo, obligándola a voltearse, luego la acercó quedando a centímetros de su cara.
La mirada de joven se había vuelto dura y poco cuerda. Se veía posesivo, demandante y obsesivo, como si no tolerara que le dijera que no.
-Te estoy diciendo que el o cualquier persona no puede tratarte así- La miro fijamente como si pudiera leer sus pensamientos -La una persona que te detiene eres tú...- le susurró al oido y le dio un suave beso en su mandíbula.

Los ojos de Coriolanous se hicieron mas suaves y acariciaba su menton suavemente con su pulgar. -Yo hare algo al respecto...nadie te va a faltar al respeto mientras que estes conmigo, entendido? - Dijo en un tono dominante y posesivo, con sus ojos llenos de ira. Rose solo asintio y lo abrazo buscando su calor y proteccion.














Deal; Coriolanus SnowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora