El Héroe, el Mafioso y el Diablo

Capitulo 4

Despertar con el olor a comida inundando su nariz, sin duda alguna era su segunda forma favorita de despertar, pero antes de siquiera poder abrir los ojos, el hambre, y el dolor en su cabeza, fueron lo suficientemente fuertes como para despertarlo de golpe, abrió sus ojos y por instinto sobó su cabeza, parpadio un par de veces para poder ajustar su vista y se dió cuenta que estaba sentada en una mesa en la cocina, miro a su derecha y en esa misma mesa se encontraba Takeshi, este tenía una bolsa con hielo en su ojo derecho y lo miraba con una mirada de muerte, se giro hacia donde provenía ese olor a comida siendo preparada.

Ahí estaba, Mitsuki Bakugo.

Su tía, su niñera, cocinera principal, ama de llaves y mejor amiga de su difunta madre.

No sabía lo que cocinaba exactamente, pero si olía bien, tenía que saber bien, Izuku intento preguntarle algo pero simplemente fue interrumpido por esta misma.

-No digas nada, di una palabra y te irás de mi cocina sin comer nada-dijo la mujer sin siquiera voltear a mirarlo.

Izuku trago con fuerza, aunque no le gustaba que lo interrumpieran cuando quería hablar, solo habían dos mujeres que podían interrumpir lo, callarlo o pegarle cuando se lo ganaba, la principal era su madre pero ahora solo que da Mitsuki.

Mitsuki parecía cocinar algo, pero no tenía la más mínima idea de que era, o si quiera era para el, volteó hacia Takeshi en busca de respuestas, pero este solo lo fulmino con la mirada, bueno, solo tiene que esperar y ver qué pasa, al cabo de unos minutos, Mitsuki parecía haber terminado la comida, intento levantarse para ir a ver qué era, pero antes de siquiera apartarse de la mesa Mitsuki lo fulmino con la mirada.

Rendido, se sentó otra vez en la mesa, ya no le importaba nada, seguramente se moría de hambre, cerro sus ojos con la esperanza de morir e ir al cielo, pero es dudoso, ha hecho cosas malas y no creé que Díos las pase por alto, de un momento a otro, abrió los ojos al poder oler comida muy cerca de el, y ahí enfrente sullo, se encontraba un tazón de comida, miro a su izquierda y ahí se encontraba su tía con otro tazón en mano, que lo miró con una sonrisa y le dijo, "provecho", paso por sus espaldas y le dió el otro tazón a Takeshi, este empezó a devorar la comida como si no hubiera un mañana.

-“¿Esos son fideos”-se percató al ver la comida de Takeshi.

Izuku jalo su plato hacia el y lo confirmo, eran fideos.

-Tia, pensé que prepararía Katsudon-le dijo a su tía Mitsuki.

Mitsuki tomo asiento en la mesa y le respondió-Ya hice Katsudon, pero tú no te has ganado el Katsudon, solo mira como dejaste a tu amigo-señalo Mitsuki a Takeshi, refiriéndose a su ojo morado-Por si fuera poco hoy tenía el día libre, y si vine no fue para cocinar te a ti-declaro alzando un poco la voz.

-¿Entonces, por quién viniste?-pregunto mientras empezaba a comer con su típica cata sería.

-Vine por tu hermana -respondio con una cara de tristeza.

Izuku dejo de comer pero sin cambiar su semblante serio, vio la cara de tristeza de su tía y ya sabía porque era.

-Tu padre me llamo como a las cuatro, me preguntó si podía venir, al parecer, Izumi no se encuentra muy bien, tu padre me contó, que Izumi no ha salido de su habitación, no le ha hablado a nadie y no contesta cuando la llaman-dijo Mitsuki con tristeza en sus palabras-Vine de inmediato, trate que me abriera por un buen rato, pero no lo hizo hasta ya en la noche, al entrar ví su cara, se ve llevaba horas llorando, no me moleste en preguntar cómo se sentía, solo la abracé y ella empezó a llorar nuevamente, la pobre no dejo de preguntar ¿El por qué su mamá tuvo que morir? Esto me destrozó el corazón, aunque trate de no llorar, termine llorando junto a ella, al cabo de un rato le pregunté si quería comer, ella asintió y yo bajé a prepararle su comida favorita-termino con la voz al borde del llanto.