about you

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Tus ojos negros la consumen cada vez que su presencia está en el radar de tu mirada. Para ti ella es una deidad, no puedes creer que exista un ser humano como ella, su existencia en este mundo trasciende más allá de lo racional y del valor existencial, para ti ella es alguien digna de venerar, de admirar.

La primera vez que la viste fue la condena de tu perdición. Ojos de cachorro, rostro de bebé, cabello revoltoso y una voz suave como la seda provocaron el descoordinado latido de tu corazón. Fue una sensación impactante, tu órgano latiente convulsionó hiperactivo, recibió punzadas frenéticas y un golpe de electricidad recorrió tus venas hasta el cerebro como señal de alerta, ni siquiera podías respirar, los párpados dejaron de funcionar para ti, tus ojos no podían dejar de apreciarla.

El primer pensamiento que cruza por tu mente es egoísta, la quieres para ti, de alguna manera lo consigues. Como su sunbae tomas la excusa de enseñarle todo lo que sabes, simulas observar sus ensayos para encontrar posibles errores a arreglar pero en realidad es una fachada para poder verla. Memorizas sus movimientos, reconoces como estos se han ido pulido con el tiempo, su voz suena cada día más armoniosa, llega el día en el que ya no hay nada más que enseñarle.

Ruegas que para entonces ella sienta un poco de apego hacia ti, la necesitas, pero no quieres parecer desesperada, no quieres espantarla. Eres feliz cuando al día siguiente se sienta a tu lado y hablan como normalmente lo hacen, adoras cuando te llama "Unnie" sabes que te has ganado su confianza. No fue realmente difícil, es lo que querías, cuidarla, atesorarla, mirarla de la única manera que solo tú podrías, la llenas de dulces cuando nadie está mirando y finalmente... finalmente llega la noche en la que cumple la mayoría de edad.

Deberías estar en casa, tus padres y tu hermana mayor están ansiosos por la llegada de un próspero año nuevo, pero a ti no podría importarte menos, tú quieres pasar el cumpleaños de Minjeong con ella. Es tan dulce y pequeña que a veces no puedes contener el deseo de capturarla entre tus brazos con fuerza, ella tararea una risa suave y sus mejillas se tiñen de un rojo tierno, hay pánico en su mirada pero no rechaza la muestra de afecto, sabes que a ella le gusta pero es demasiado tímida para confesar.

Estás bien con eso. También estás bien con la sugerencia que da, tu pequeña Minjeong —es un año menor que tú— quiere probar el alcohol por primera vez. No lo demuestras físicamente pero dentro de ti todo es un caos, una multitud de mini-Jimin corren de un lado a otro en tu mente, por un lado estás preocupada, también tienes pena —la has visto crecer demasiado rápido— por otro lado sucumbe el deseo "¿Cómo se verá borracha?" no puedes evitar preguntarte, seguramente será más tierna de lo habitual, pero aún así deseas comprobarlo.

Fuera de la tienda de conveniencia le ofreces soju de melocotón, piensas que es una buena manera de iniciar pero no se escapa de tu radar como su ceño se frunce ante el primer sorbo, le escuchas decir "No está mal" con un tono pensativo y tú te ríes, sabes que se está haciendo la fuerte. Piensas y crees firmemente que ella no tiene nada que demostrar, para ti todo está bien si viene de su parte, pero también sabes que es su deseo caprichoso, el querer crecer y convertirse en una adulta "de verdad" no le quitarás eso así que le haces compañía junto con algunas golosinas con las que tanto la mimas.

Dos chicas más rondan alrededor de ustedes, hacen un buen equipo, con ellas te sientes en familia, todas encajan perfectamente. Dentro de tu corazón deseas que ninguna pueda reemplazar tu lugar junto a Minjeong pero no puedes permitirte algo como aquello, sabes que eventualmente conocerá más gente y tu pequeña ya no será tuya y no te quedará más que mirar, como siempre has hecho.

Pasa el tiempo demasiado rápido, con tantos entrenamientos hasta la madrugada y grabaciones en horarios desalentadores finalmente logran debutar. Te eligen como la líder y todos parecen haberlo esperado, eres la mayor después de todo, llevas más tiempo entrenando que el resto. Recibes muchas felicitaciones al respecto, a ti no te importa mucho, lo agradeces humildemente pero prefieres que el entusiasmo se dirija principalmente a tus compañeras, quienes están entusiasmadas de finalmente poder pararse sobre escenarios de verdad.

HEAVENLY ๑ WINRINA OSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora