| • ° † Nᴏ sᴏʏ ᴛᴜ sᴇɢᴜɴᴅᴀ ᴏᴘᴄɪᴏ́ɴ † ° • | Hashirama Senju

"Eʀᴇs ᴍɪ́ᴀ"

| • ° † Nᴏ sᴏʏ ᴛᴜ sᴇɢᴜɴᴅᴀ ᴏᴘᴄɪᴏ́ɴ † ° • |

"Eʀᴇs ᴍɪ́ᴀ"

Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ: 15

Me dirigí hasta la habitación de ________ para poder pedirle disculpas y ver si podemos comenzar de nuevo, ya que está más que claro que no empezamos muy bien y me gustaría que podamos ser amigos sin tener que pelear, sin tener que vernos con ganas de matarnos el uno al otro, ni siquiera sé cómo demonios empezó esto, sólo sé que no soporto la idea de tener que verla con alguien más que no fuera yo, quizás porque me recuerda mucho a Yuji, a veces pienso que es ella quien está conmigo, pero cuando la veo mejor, me siento una vez más vacío.

Sé que debo dejarla ir porque ya está casada, pero yo no sé cómo diablos dejarla ir, no sé cómo olvidarla, y ahora con su hermana parece que estoy comportándome como un imbécil, y a veces la noto triste por mis errores, quisiera cambiar eso pero no sé cómo, es por eso que estoy decidido a olvidar todo lo del pasado y comenzar de nuevo, si es que ella lo quiere así, de lo contrario no puedo hacer nada más. Toque su puerta llamándola un poco bajo pero que fue audible para ella ya que me pidió irme y no buscarla de lo que quedaba de la noche.

—Oh vamos, sólo quiero hablar contigo un momento —le pedí tocando una vez más la puerta

—Pero yo no, déjame en paz —dijo algo molesta

—Quiero disculparme contigo —me estaba molestando también pero me calme —Oye no quiero pelear otra vez, quiero arreglar las cosas contigo.

—Sólo lo haces por mi hermana, pero no tienes que hacerlo para agradarle, después de todo ya son mejores amigos, y si me odias no cambiará nada entre ustedes, total, no tienes que aguantarme por más tiempo porque me iré.

—¿Qué?, ¿Estás de joda?, ¿A dónde demonios te irás a esta hora?, no creo que quieras pasar la noche en la calle —sonreí ladino

—¿Y quién dijo que pasaría la noche en la calle?

—¿Qué?

Ella ya no me respondió, ni mucho menos me abrió la puerta, pues se quedó callada murmurando algo que no logré entenderle, y por más que le pedí que me abriera la puerta no lo hizo, lo que escuche después sólo fue un: “vete al diablo” que por supuesto me molestó bastante pues yo quería arreglar las cosas y ella no estaba cooperando con ello, no me estaba ayudando mucho que digamos, pues lo único que está haciendo es mandarme a la chingada y mi paciencia se estaba agotando demasiado rápido.

Le pedí una vez más que me abriera la puerta con tranquilidad, le pedí una vez más que me dejara entrar a su habitación por favor, pero una vez más me mandó a la chingada y me pidió que dejara de molestarla de lo contrario le llamaría a su hermana para que pudiera dejarla en paz, yo desesperado y ya sin paciencia pase mis manos por mi pelo respirando hondo y dejando salir el aire poco a poco.

—Entiende que no puedo dejarte ir con ese idiota porque eres mía.

Hubo un silencio que hasta a mí me incómodo, ¿Cómo se me ocurre decirle eso?, ¿Mía?, ¿Desde cuándo es mía?, si serás tremendo idiota Hashirama, ¿Cómo demonios puedes decir eso en una situación así?, ni siquiera le caes bien para que estés diciendo que ella es tuya, Dios creo que me estoy volviendo loco.

Deje de insistir para irme a mi habitación, ahí me despoje de mi ropa y me fui a dar un baño, el cual pensé que podría relajarme, pero lo único que hizo fue darme un montón de ideas, miles de pensamientos llenaron mi cabeza que no me estaban dejando en paz, Dios ¿Por qué la tuve que llamar así?, pensará que estoy loco o peor aún, que estoy jugando con ella, pero es que no mido lo que digo y salen por sí solos, ahora tendré que disculparme dos veces, que brillante eres Hashirama, ahora te va a odiar más de lo que ya lo hace, ahora tendrá más ganas de irse del departamento y todo por tu estúpida bocota que no se mantiene cerrada cuando más lo tiene que estar.