La Odisea con un Omega en Embarazo /// HanniGram

Capítulo 10

Los días pasaron y las vacaciones de Will empezaron, Will tenía tantas cosas que hacer y a la vez nada, y como él es una persona que no tiene ni la menor idea de como pasar un día libre, le está siendo ligeramente difícil.

Cuando vivía en Wolf Trap era fácil ya que podía arreglar motores todo el día o pescar, sus hobbies favoritos, aún cuando tenía la oportunidad de ir al lugar, era un viaje bastante largo y quería experimentar como pasar sus momentos libres en casa de Hannibal

Los primeros días fueron por así decirlo "fácil" tal como dijo Hannibal, Will podía perderse en las películas sin problemas todo el día y más allá, aquello había funcionado al principio pero luego de llegar al cuarto día empezó a sentir la monotonía caerle, por más interesantes que las películas fueran, estar en el sillón acostado durante horas desde temprano empezó a dejar de ser atractivo

Así que empezó a buscar otras cosas que hacer, empezó con el arte de la limpieza y la podadora, aquello lo entretuvo demasiado y hacía que el día se fuera rápido hasta la llegada de Hannibal

Will fuera feliz con ello encontrando su comodidad para sus días en casa, si no fuera porque todo terminó cuando menos lo espero, no había mucho que arreglar o limpiar, volvió nuevamente a su total aburrimiento.

Will no pudo evitar desear que Hannibal hiciera un par de cazas y trajera sus premios mayores, ensuciara un poco la zona para entretenerse limpiando. Era obvio que estaba pensando sandeces cuando no era amante a la limpieza, pero ahora deseaba una buena entretención

Cumplió su semana en casa al igual que su quinto mes de embarazo, aún no tenía un oficio fijo para entretenerse, a veces leía sus libros de embarazo y paternidad, ya tenía mucho que no iba a ésas reuniones y estaba pensando seriamente en ir a alguna, los libros no entretenían en nada.

Cada vez las cosas se volvían más ansiosas para Will, ya nada lo entretenía, incluso le pidió a Hannibal que le diera clases de dibujos para hacer en casa y éste con gusto lo hizo, aquello lo tenía medio ocupado por un tiempo, dando sus mejores artes, y aún así no lo llenaba

Jugaba y atendía a sus canes pero tampoco le era suficiente, no lo entretenía como lo hacía en el pasado y gracias a ello vio que realmente tenía un gran problema con su hiperactividad

Él sabe que es una persona que necesita la mente ocupada, toda la vida ha sido así, pero aprendió a controlarlo, mientras pasaban los años él supo como manejarlo y tener sus momentos de paz de vez en cuando, pero ahora su ansiedad se había disparado por las nubes y no sabía como controlarlo, ya no podía entretenerse con cosas simples, necesitaba que su mente estuviera bastante profunda para hacerlo, ahora entendía porque en los meses pasados estuvo tranquilo, siempre trabajaba y se ocupaba de su clase al igual que participaba en ciertos casos, ahora no tenía nada nada de éso

A la siguiente semana empezó a salir de casa, se dirigía a los lugares cercanos solo para ver comida y comprar cosas, llenaba las encimeras con cosas a su gusto, volviendo a tener unos chocolates que siempre le han gustado y que para su suerte en su embarazo seguía siendo igual, en la refrigeradora metía bebidas y productos sacando los vinos carísimos del mayor colocándolo en otro lugar, por supuesto, su leche de la vaca lola tenía más prioridad que el alcohol de Hannibal

— Pero que-

Cuando Hannibal abrió y vio su preciada refrigeradora, su lugar favorito y amado, lleno de productos del mercado de pueblo o de gangas de segunda, quedó en estado de goma, no podía creer que su cocina parecía la tiendita de la señora letty de un barrio latino lleno de malas vibras

Sintió unas manos rodear su cintura y besar su cuello en el momento exacto en que iba a explotar del horror

— ¿Qué vas hacer para cocinar~? —preguntó con sumisión