La Odisea con un Omega en Embarazo /// HanniGram

capítulo 28

- ¿Está bien?

- Sí... muchas gracias Hannibal

- No tienes que agradecer Mylimasis, siempre te servire en lo que necesites

Era de noche, habían terminado de cenar y perfumar a los canes para la hora de dormir, luego de hacer todo eso, Will se sentía agotado e hinchado, aún cuando no fue mucho lo que hizo en el cuarto de Abigail, ése día había hecho más cosas de lo que está acostumbrado hacer

Hannibal se ofreció para hacerle masaje y aunque Will se negó al principio porque ya iban a dormir y con éso seguro se le quitaría los dolores.

Ahora se encontraban en el sillón de la sala, Will recostado, apoyando su cabeza en la mano del sillón mientras tenía todas sus piernas en el regazo de Hannibal recibiendo sus masajes que estaban minimizando sus hinchadas y cansancio, las manos de Hannibal eran mágicas.

Se había cambiado de ropa luego de bañarse, tenía puesto una camisa blanca de Hannibal que le llegaba a la altura de los muslos, aunque en la posición que estaba ahora, estaba bastante descubierto mostrando su ropa interior.

- No para de salirme estrías en las tetas -comentó luego de un rato de silencio

- Se están llenando, la piel se estira y provoca ésas roturas -explicó-. Solo ponte la crema hidratante que te compre

- No me sirve, siento que no hace nada -suspiró meneando sus labios

Hannibal lo miró, Will tenía los ojos cerrados, bastante precioso, sonrió.

- Will, tus estrías son bastante tenue

- ¿Pero qué dices?

- Claro que si, son líneas que no se han pronunciado demasiado, como por ejemplo en tu vientre, a esa si le has hecho un drama horrible -le recordó, Will abrió los ojos para verlo-. Estás bien con ellas, no son tan "horribles" y se están yendo, solo que tu cabeza no lo deja ver

-bufo y miró a otra parte- Si claro, lo dices porque no te importa -dijo indignado

- ¿Y a quién más le debe importar?, se supone que si te quieres ver bien, es solamente por mi, ya que por ti, es menos probable -señaló y Will miró-. ¿O es que te quieres poner bonito para otra persona? -enmarcó una ceja

-ríe- Traumado, deja el drama, solo digo que no quiero quedar tan marcado

- Y no lo quedarás -aseguró y volvió a mirar el pie ajeno-. Y permíteme exponerte un asombro: jamás te importó tu cuidado-

- Yo no-

- Sé que cuidabas mucho de ti Will - interrumpió-, eres un hombre con buena higiene además de que te preocupas por las anomalías -aceptó-. Solo que ahora estás siendo demasiado extremo, mucho más que yo -aseguró y Will rió-. Cariño, es normal que te brote un montón de cosas en pleno embarazo y más aún, en el último mes, tus granos, estrías y enrojecimiento es tan normal hasta que salgas del embarazo.

-suspiró- Pero yo no veo que-

- Ya hemos hablado de esto, Will, sé que es duro para ti estos cambios siendo un omega bastante lejos de lo que deberías de aplicarte, pero aceptaste el embarazo y debes aceptar lo que viene -Will suspiró-. Luego de que salgas puedes volverte un demonio, brincar, hacer ejercicio, bañarte con cremas para quitarte los residuos que quedan, todo lo que quieras, ya falta poco, solo tienes que esperar ¿bien? -Will meneo sus labios-. Te aseguro que cuando tengas a Abigail, es lo último que pensaras, en tu cuerpo -ríe

- Lo dices por los omegas que se dejan y se vuelven horribles -se echó a reír

- Lo hacen porque la crianza es difícil, cuidar un bebé es bastante cansado más que un perro -expuso-, así que todo eso del físico quedará en quinto plano -Will rió por la exageración-. Lo importante será Abigail