Mi vida con los chicos Walter-Isaac García

Un nuevo comienzo

Era la noche perfecta, todo estaba fríamente calculado por Jackie, y al fin había llegado el gran momento. Todos se estaban divirtiendo, cada persona guardaba buenos recuerdos en este baile o bueno, todos menos nosotras. Después de todo no todo fue como lo planeamos.

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Al colgar la llamada con nuestro Tío Richard intenté localizar a la mejor amiga de mi madre, se suponía que ella y su esposo estarían a cargo de nosotras ahora. Al ver por donde venían avisé a Jackie para que guardara su teléfono.

-Niñas...están tan grandes...- Katherin nos envolvió en un dulce abrazo, aunque no fuera algo a lo que estaba acostumbrada intenté corresponderlo. - ¿Cómo les fue?

- Bien, algo largo el viaje pero estuvo tranquilo. - Jackie se estaba esforzando por ser simpática y hablar con normalidad pero yo sabía lo afectada que estaba en realidad.

- Bueno...- George creo que no sabía que hacer lo decir así que solo nos apretó el hombro y empujó solo el carrito de Jackie ya que le dije que yo llevaría el mío.

Nos subimos al coche y le di play a mi playlist preferida, habían canciones en inglés y en el español ya que hace unos meses me propuse aprender el idioma al saber que los sobrinos de George eran latinos. No sabía sus edades pero me imaginaba que tenían la edad de la hija del matrimonio. Inmersa en mi música me distraje viendo el paisaje de Colorado, definitivamente no era nada parecido a lo que estábamos acostumbradas pero tenía esperanzas de que no fuera horrible.

- Llegamos chicas, yo me encargo de sus maletas, vayan con Katherin. - George se bajó, abrió la puerta de su esposa y se dispuso a bajar nuestras bolsas.

- Vamos.- Katherin nos dirigió al porche de su casa, la cual era muy grande. Debe serlo, con tanta gente viviendo en ella, pensé.

Al intentar llegar a la puerta a Jackie casi la atropella un chico en patineta. Katherin se disculpó por eso y oímos otra voz desde el otro lado de la casa.

- ¡Hola! Soy Danny.- Era un chico sentado en unas sillas, estaba leyendo un libro y se veía amigable.

- Jackie y ella es mi hermana, Zoe.- Jackie salió a mi rescate al ver que me había atascado al hablar. Últimamente solo con ella era capaz de hablar sin tartamudear, esperaba que no me pasara seguido con nuestra nueva "familia".

Al pasar por la entrada Katherin atendió una llamada y hablaba de algo a lo que en verdad no preste atención. En el recibidor vimos correr a un niño pequeño y al ir a la sala vimos a otros dos. Un chico pecoso de ojos claros, parecía amable y no pude evitar ver como observaba a mi hermana. A su lado había otro chico, me tuve que controlar para no hacer ninguna cara. Su cabello era negro y parecía lo más suave del mundo. Su mirada divertida estaba centrada en mí.

-¿Qué onda?- Fue lo único que dijo antes de volver su vista al televisor. Grosero si me lo preguntaban a mí.

- Hola, soy Alex...- El pecoso salió de su trance y le tendió la mano a Jackie.

- Jackie...- Me sorprendí al ver como se ruborizó, esto sería divertido definitivamente.

- Soy Zoe, ¿qué tal?- Dije lentamente para evitar trabarme.

Vi a otra persona entrar a la habitación, era un hombre joven y nos sonrió.

-¡Will! Perfecto, encárgate de presentarlas por favor. Niñas, debo irme, en serio lo siento. Él es mi hijo mayor, las presentará a todos y les mostrará su habitación. No duden en llamar, ¡adiós!- Al salir por la puerta volví mi mirada a Will, parecía que no sabía bien que hacer.

- Bueno, soy Will. Ya conocen a Alex y el que no se separa de la pantalla es Isaac, él y Lee son nuestros primos.- Desde ese momento dejé de prestar atención. Creí que los sobrinos serían niños pequeños, no que uno sería un chico...así.

-¿Y-y el de la patineta?- Dije tratando de concentrarme.

- Ese es Lee, espero que no las haya arrollad- Will se abalanzó al niño que antes estaba corriendo al ver como llevaba un vaso de cristal en las manos.- ¡Benny dame eso! Lo siento les juro que él es tranquilo.

No pude evitar reír ante la escena y vi como Jackie miraba con cariño al pequeño. Siempre se había llevado muy bien con los niños y bebes, no la entendía sinceramente.

Al volver con nosotras, Will les pidió a Isaac y Alex que trajeran nuestras cosas mientras nos mostraba la casa e íbamos al jardín. Al salir se nos acercó corriendo un chico con una cámara y vimos como Lee, el chico de la patineta jugaba con una niña rubia.

- Jordan deja a las chicas en paz.- El mayor intentó apartar a su hermano.- La niña es Parker y...el que sale de la piscina como en un comercial, es Cole.

Cole, salía del agua haciendo su pelo hacia atrás y mirando como si no estuviésemos. Era guapo y su físico era bueno, pero algo me decía que él causaría problemas. Will también le pidió a él llevar nuestras cosas al cuarto cuando vio que su perro empapó a Jackie ya que ella no se alejó a tiempo.

-¿Viven todos aquí?- Mi hermana parecía sorprendida y algo ¿asustada? al ver que tendría que convivir con tanta gente. Su tono podría haberse malinterpretado pero espere que el mayor entendiera que no era desagrado.

- Casi. Yo vivo cerca con mi prometida pero el resto si viven aquí. Son Cole y Danny, gemelos. Alex, Nathan, Isaac y Lee, nuestros primos y Jordan, Parker y Benny. Entiendo que les resulte algo complicado acostumbrarse a tanta gente pero les prometo que si les dan una oportunidad verán que son buenos chicos...la mayor parte del tiempo.- Reímos con él y entramos a nuestro cuarto. Habían dos camas en distintas esquinas de la habitación, algunas cajas y ¿material de pintura?

- Era el estudio de arte de mamá.- Escuchamos una voz que venía desde la puerta para luego oír como una caja caía al suelo, era Cole.- Bienvenidas.

Will nos informó que comeríamos en breve pero ninguna de las dos tenía apetito. Cuando ambos hermanos salieron del cuarto me dirigí a una de las camas y me tiré. Estaba agotada en todos los sentidos posibles.

- Lo hiciste muy bien Zoey, hablaste bastante.- Comentó sonriendo mi hermana mientras desempacaba algunas cosas.

- Será complicado adaptarnos...Jacks...- Me acerqué a su cama con los ojos enrojecidos. Ella me entendió de inmediato y me abrazó. Ambas empezamos a llorar.

- Estaremos bien...te lo aseguro.- Me abrazaba tan fuerte como yo a ella.- También los extraño pero ahora solo debemos ver lo que nos queda, nosotras.

- Y una fortuna en una cuenta bancaria...- Intenté bromear un poco recibiendo un level golpe de parte de Jackie.

- Deberías empezar a ordenar tus cosas, ahora compartimos y yo prometo no ser tan...exigente, con la limpieza si tú prometes no ser un desastre.- Me miro sabiendo que la limpieza y el orden no eran para nada mi fuerte.

- Está bien...prometo ser pulcra para ti, bella dama.

Mirando como Jackie reía y volvía a acomodar cosas, sonreí. Estaríamos bien...

Creo que para empezar no está mal, ¿no?

Toda crítica constructiva es bien recibida al igual que sugerencias para la historia.

• Gracias por leer •