Te Elegiré Siempre

41. "Promesas"

Rebecca Armstrong

Maneje con cuidado, hasta llegar a la casa de mi padre, Freen se veía emocionado de volver y eso me hacía sentir también feliz.

-¿Estás bien amor? -me volvió a preguntar Freen, yo me sentía tensa.

Después de todo al pedirle a mi papá irme a la ciudad dónde Freen estudia era para mantenerme alejada de todo, no habíamos hablado del tema, de absolutamente nada relacionado a Heng o Sunan, todavía era un peso que cargaba.

-No estoy lista para enfrentar todo esto... -susurre, ella me sonrió, tenía un brillo especial y eso me hizo confundir.

-No lo harás sola, mientras yo esté a tu lado todo estará bien, ven vamos. -ella se bajo y me abrió la puerta, mientras estiraba su mano.

-¿Mi amor? -empezamos a caminar y Freen no me llevo a la puerta, si no al patio y yo estaba confundida por esté movimiento.

-Sé que cargas con un peso que no deberías, por qué todo lo que hiciste fue para nuestro bienestar, y lo único que quiero mostrarte es que no solo nos salvaste a nosotros, si no qué también a mucha gente agradecida contigo. -yo no sabía que decir, en frente de mi había familias que al verme me sonrieron agradecidas, y todos al mismo dijeron gracias...

-¿Qué es esto? -pregunté sorprendida, no me lo esperaba.

-Familias que están agradecidas contigo, por tu valentía y coraje. -miré a todas las personas y estás parecían muy felices, una pequeña niña se acercó a mí, me agaché a su altura.

-Gracias a ti, pude volver a ver a mis padres... -y esas palabras me destrozaron, ellos eran crueles, lo único que hice fue ser fuerte contra ellos...

No era mi culpa su final... ellos mismos lo decidieron...

-Me alegra escuchar eso bonita... -susurre mientras lagrimas brotaban de mí.

-Ves hija, no tienes culpa de nada, la vida les hizo pagar sus fechorías y a ti te dio la oportunidad de estar con las personas que quieres, y aún más les dio la oportunidad a estas personas de poder vivir tranquilos. -dijo mi papá mientras me abrazaba.

-Te extrañé papá...

-Yo también hija... -Freen nos miraba con lágrimas. -Ven tú también Freen, después de todo ya eres una hija más. -los tres nos unimos en un lindo abrazo. Después de eso me acerque a las familias que me abrazaron, y me daban regalos, fue algo lindo pero no era algo de mi estilo.

Me sentía agradecida por todo esto, me hacía sentir en paz...

-Papá, ¿tú planteaste esto? -pregunté mientras veía a mi Freen hablar con unas pequeñas niñas que sonreían divertidas, ella se veía tan hermosa...

¿Cómo sería ella cuidando un hijo? -imaginarme esa imagen apareció en mi mente, y sonreí tan ampliamente, mi corazón se llenó ilusión.

-No hija, fue Freen, ella sabía cómo te sentías, lo hizo para que estuvieras feliz. -miré a Freen sorprendida, ella sintió mi mirada, nuestros ojos chocaron, y pude ver una hermosa sonrisa en sus labios y un brillo tan especial...

-La amo tanto... -dije, mi papá me dio un pequeño golpe en la espalda. -Me casaré con ella. -hablé firme, mi papá se sorprendió por mis palabras.

-No tardes entonces hija, hazlo posible. -yo solo asentí.

Y en ese momento me di cuenta de que todo estaría bien.

-¿Bec? -mi linda novia me hablo, yo me había alejado de toda la gente para darme un respiro.