12

169 18 1
                                    

Llego a casa y abro la puerta, haciendo el mínimo ruido posible. Mi padre estaría trabajando pero mi madre no, así que rezaba porque estuviera dormido... pero no.

Al entrar, le veo de brazos cruzados, viéndome, serio.

- Buenos días... - Digo, algo bajo y nervioso.

Toni alza una ceja. - Buenos días, ¿dónde estabas?

- Perdón por no avisar, me quedé en casa de un amigo, pasó algo y todo fue muy rápido. Lo siento de verdad.

Casi suplicaba. Mi padre me daba miedo, pero, ¿mi madre? él puede hacer el mundo arder, pero literalmente.

- ¿Tu amigo está bien? - Pregunta, sin más.

- Sí, anoche estos la liaron, pero ya está, todo bien.

- Mmhm... - Se queda unos cuantos segundos mirándome, hasta que de repente, vuelve a su postura de siempre y me sonrie levemente. - Está bien, ¿has desayunado?

Suelto un suspiro, casi de alivio. - Sí, desayuné con él.

- Bien, ahora ave a recoger tu cuarto y pinte a estudiar, anda.

Le doy un abrazo que él corresponde y subo rápido a mi habitación, empezando a recogerla.

Mientras recogía, pensaba en aquel piso que había visto. Nunca me había separado de mis padres y ya era hora de hacerlo, asi que había buscado pisos que me pueda pagar yo de momento con los estudios y con algo de ayuda de mis padres, y lo había conseguido.

Pasan unas cuantas horas en las cuales me dedico a estudiar, tranquilo, repasando todos los apuntes que tenía. Ya sobre las dos de la tarde, alguien llama a la puerta antes de entrar. Giro mi visita hacia mi padre, quien se sienta en mi cama.

- Buenas. - Giro mi silla, giratoria, hacia él.

- ¿Con quién te quedaste anoche?

Oh oh... ¿Qué le decía yo ahora? Digamos que mi madre hace el mundo arder cuando está enfadado, pero mi padre solo hace el mundo arder cuando no conoce a alguien con quien hablo, y ¿cuándo mi padre no conoce a mis amigos? cuando esos amigos van con segundas.

- Es un amigo, papá. Es Raúl, el de la cafetería.

- Mmhm...

Dios, es igual que mamá. Se queda en silencio unos segundos y después se levanta saliendo de la habitación.

- Vamos a comer. - Dice, sin más.

Recojo todo antes de bajar y sentarme con ellos a comer, empezando a hablar del día de hoy.

Narra Auron

- ¿Puedes venir ya, entonces?

Estaba en llamada con mi jefe de nuevo, me acababa de avisar de que si podía ir ya.

- Sí, ahora mismo estoy allí.

- Perfecto.

Cuelga. Salgo de casa y voy con el coche de nuevo hacia el lugar. Donde entro y veo a toda la gente allí.

El primer video. Era bastante tranquilo, por suerte era algo cuidadoso el chaval con quien me tocaba, así que no tenía mucha queja.

El segundo vídeo... fue empeorando. Ya empezaban con juguetes, los cuales no estaban mal pero algunos hacían daño, pero me tenía que aguantar, necesitaba el dinero, no estaba para quejarme.

El tercer vídeo... puede que sea el mejor, yo no recibía, y era cuidadoso con la chica. Los dos estábamos cómodos, la verdad es que era muy maja.

El cuarto vídeo, de nuevo era algo masoquista. Pero no el peor.

¿Navidad? [RebornPlay] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora