〖Cuestión de altura ❦ Yaku Morisuke〗

ᶜᵃᵖⁱᵗᵘˡᵒ⁷

- Yaku-san~

La voz de T/n resonó en el gimnasio, pero tan pronto como entró Yaku se fue ignorandole por completo.

- ...

- ¡Ya hasta lo espantas! - Kuro le palmeó la espalda divertido, pero cuando planeaba seguir burlándose notó su expresión.

T/n había borrado su sonrisa y ahora mantenía una expresión seria mientras miraba la dirección en la que Yaku se había ido.

- ¿T/n? ¿Estás bien? - Kai se acercó preocupado.

- ¿Uhm? - Les miró y solo se encogió de hombros despreocupado. - Sí, no pasa nada.

Sus amigos le miraban sin creerle demasiado, después de todo el T/a tenía una apariencia despreocupada, pero no sabían lo que pasaba por su mente y eso les preocupaba.

Y la verdad es que en la mente de T/n todo era un desastre, solo hace unos días estaba en su casa con Yaku haciéndole mimos y ahora este le ignoraba como si no estuviera ahí, no comprendía la situación y al mismo tiempo dolía, dolía más de lo que le gustaría admitir.

- No me gusta este sentimiento...

Los días iban pasando y los rumores creciendo, para nadie pasaba por desapercibido el hecho de que T/a T/n volvía a ser un lobo solitario como en primer año, ya que, todos notaban la ausencia de aquel líbero y el como el más alto volvía a tener una mirada aburrida todo el tiempo.

Algo había sucedido y todos lo notaban.

- ¡Ya déjame, Kuro!

T/n dejó de caminar automáticamente por el patio, por supuesto que reconocía aquella voz y no sabía si debía oír a escondidas, pero la curiosidad la tenía a flor de piel, esta podía ser la única oportunidad para descubrir qué le sucedía a Yaku.

Se escondió detrás de un par de árboles y empezó a escuchar mientras sus manos sudaban y su corazón latía fuertemente, tenía miedo de lo que podía llegar a oír.

- No te voy a dejar ¿Qué sucedió con T/n? El pobre parece un gato abandonado que tiraron sin decir nada. - Kuro se dirigió con cierta molestia hacia el contrario.

- Yo no abandoné a nadie, no somos nada. - Recalcó con enfado.

- ¿No son nada? Por favor, se gustan desde hace años, no vengas a negarlo ahora. - Kuro bufó al no recibir respuesta. - Escucha, Yakkun, tienes que actuar de una vez y tomar la iniciativa, a T/n le gustas y mucho.

- Claro, le gusto. - La voz de Yaku sonó con cierta ironía confundiendo a Kuro y al espía.

- Claro que sí y a ti también te gusta.

- ¿Cuántas veces debo decirlo, Kuro? Llevo desde primer año diciéndolo, no me gusta ese gigante ¿Cómo podría llegar a gustarme T/n? No es mi tipo.

Al oír aquellas palabras T/n se agarró el pecho, dolía e inconscientemente había dejado de oír la conversación de esos dos, sentía que todas sus esperanzas se hacían añicos en cuestión de segundos.

- Yo soy el problema.

Después de afirmar aquello se retiró del lugar sin hacer notar su presencia, ahora empezaba a comprender que tal vez él estaba forzando a Yaku todo ese tiempo, tal vez siempre fue un sentimiento unilateral.

Era tal y como cuando no dejan que un gato se vaya cuando no se siente cómodo.
Al parecer él tuvo que esperar los arañazos para reaccionar.

Pero T/n tampoco vio la expresión dolorosa que tenía Yaku cuando decía todo aquello, si la hubiera visto habría notado que a Yaku le dolía cada palabra que salía de su propia boca.