Castillo de naipes [Kookv]

Capítulo 16

Con el pasar de los minutos, la temperatura en el cuerpo del alfa empezó a aumentar hasta que comenzó a sudar. Intentó repetidas veces levantarse para intentar nuevamente pedir ayuda, pero cada vez que se levantaba, el dolor de su abdomen bajo le hacía caer una y otra vez al suelo.

No entendía lo que estaba pasando; él jamás sería capaz de olvidar algo tan importante como su ciclo de celo. Tampoco es como si fuera de esos alfas corrientes como para que se manifestara irregularmente.

Aún era muy joven, por lo que lidiar con su deseo de apareamiento no le resultaba nada fácil, y por alguna razón algo en su interior le decía que con este repentino celo sería mucho peor.

Gimió y gruñó por el dolor que cada vez se hacía más grande, tan inmenso como el mismísimo infierno. Si bien eso era lo normal en el celo de cualquiera, Jungkook sentía éste con mucha más fuerza que en las temporadas anteriores. Tan sumergido estaba en su sufrimiento que era inconsciente de lo que estaba haciendo, liberaba feromonas de forma descomunal.

Muy pronto la sala completa se llenó del olor a alfa en celo que desprendía Jeon, Taehyung las sintió atacarlo profundamente. Era un llamado, el llamado del alfa en el interior de Jungkook para que le ayudara a calmar su estado.

Las piernas del omega temblaron tanto por las feromonas como por el miedo que sentía ante la posibilidad de que dichas feromonas le hicieran entrar en celo a él y terminara fornicando con Jungkook. Con los nervios al mil, pateó la puerta hasta el cansancio y ni aún así pudo abrirla; en situaciones así debía mantener la calma, pero temía que si no salía rápido tal vez ya hasta llevaría una cría de Jungkook.

- ¡Haz algo, idiota! - Le gritó desesperado el omega al alfa. Su cuerpo también comenzaba a calentarse.

Ver a Jungkook sin poder mantenerse de pie le frustraba; justo ahora necesitaba de la fuerza del alfa para derribar la puerta.

- Ayúdame - Susurró casi inaudible Jungkook- Necesito ayuda.

Taehyung interpretó aquello como si Jungkook le estuviera pidiendo ayuda con el celo. Sin embargo, a lo que él alfa se refería es a que el omega le ayudara a ponerse de pie.

- ¡No pienso ayudarte con nada, imbécil! - Gritó nuevamente, lo que provocó un gruñido por parte de Jungkook.

Los gritos del omega le provocaron un dolor de cabeza; si Taehyung seguía gritando, entonces perdería los estribos. Gran error del omega el gritarle a un alfa dominante, puesto que esto únicamente aumentó las ganas de Jungkook por dominar al omega en el apareamiento.

Todo estaba jodidamente mal; todos los eventos vividos hasta ese instante le sumaron más peligro a la droga antes ingerida.

Primero estaba el hecho natural de que un alfa era muy susceptible a sus instintos; segundo, que al ser alfa dominante, estos instintos actuaban con más fuerza. Podría controlarlos, sí, pero eso sería con el tiempo. También estaba el hecho de que su celo, de forma natural, se ponía más intenso con la llegada del destinado.

Jungkook recordó en ese momento las pocas veces que Namjoon y Yoongi le contaron sobre sus épocas de celo después de encontrar a sus respectivos destinados. Namjoon no tenía tantos problemas; sí, le fue difícil al principio, pero al recibir la ayuda de Seokjin, básicamente su problema había sido resuelto.

Por otro lado, estaba Yoongi, que no corría la misma suerte. Su omega no lo aceptó como su destinado y tampoco se apiadó de él; por eso Yoongi sufría, no deseaba a nadie más que no fuera Jimin y ni aún así Jimin volteó a verle. El celo para Yoongi era un completo martirio.

En su momento, Jungkook se burló de Yoongi por aquella situación y ahora lo más probable es que él terminara de la misma forma que su amigo. Eso le molestó e hirió profundamente su orgullo.