𝐋𝐨𝐯𝐞𝐝𝐭𝐚𝐥𝐞: 𝐄𝐥 𝐑𝐞𝐧𝐚𝐜𝐞𝐫 𝐃𝐞 𝐀𝐢𝐝𝐞𝐧 [Dark] [Genocida]

Capitulo 25 Temporada 1

Aiden estaba en su departamento, concentrado en limpiar y mantener sus armas en perfecto estado. La tensión en el aire era palpable mientras se aseguraba de que cada arma estuviera lista para lo que pudiera venir. Sin embargo, de repente, sintió una presencia detrás de él, una sensación incómoda que lo hizo girar rápidamente, apuntando su pistola hacia la figura que se encontraba allí.

El ser que se materializó ante él era una criatura oscura y viscosa, con una apariencia que irradiaba malevolencia. Se presentó como Nightmare y le hizo una propuesta a Aiden, ofreciéndole un trato que involucraba las emociones negativas a cambio de su ayuda.

Aiden frunció el ceño y miró con desconfianza al ser oscuro que tenía delante. Sabía que no podía confiar en una criatura como esa y que las intenciones de Nightmare podrían ser peligrosas.

Aiden: (con cautela) ¿Y qué es lo que quieres de mí, Nightmare?

Nightmare: (con una sonrisa siniestra) Lo que quiero son tus emociones negativas, Aiden. Las emociones oscuras y destructivas que albergas en tu corazón son una fuente de poder que podría beneficiarme mucho.

Aiden: (manteniendo su arma apuntada) No me interesan tus tratos. Sé lo que eres y sé lo que buscas.

Nightmare: (frustrado) Parece que no entiendes la magnitud de mi oferta. Mis poderes podrían ser de gran utilidad para ti, pero parece que prefieres rechazar mi generosidad.

La tensión en la habitación aumentó cuando Nightmare lanzó un pentáculo en dirección a Aiden. El pentáculo se materializó en el aire y se movió rápidamente hacia él. Sin embargo, Aiden no estaba dispuesto a ceder ante la amenaza del ser oscuro.

Con un rápido movimiento, Aiden desenvainó su espada de furia y cortó el pentáculo en el aire antes de que pudiera alcanzarlo. El pentáculo se desvaneció en fragmentos de energía oscura, dispersándose en el aire. Aiden mantuvo su arma en alto, listo para enfrentar cualquier otra amenaza.

Aiden: (desafiante) No voy a caer en tus juegos, Nightmare. Puedes marcharte.

Nightmare, visiblemente molesto por la respuesta de Aiden, dejó escapar un gruñido gutural antes de desvanecerse en la oscuridad, retirándose del departamento de Aiden. El joven se quedó solo, con el corazón latiendo con fuerza por la intensidad del encuentro.

Aiden sabía que había hecho lo correcto al rechazar la oferta de Nightmare. No estaba dispuesto a entregar sus emociones negativas a cambio de poderes oscuros. Sus acciones y decisiones eran suyas, y no permitiría que seres oscuros como Nightmare manipularan su destino.

Mientras seguía limpiando sus armas y se preparaba para lo que vendría, Aiden sabía que su camino estaba marcado por la venganza y la oscuridad. No aceptaría la ayuda de criaturas malignas en su búsqueda, y enfrentaría cualquier desafío que se interpusiera en su camino con determinación y ferocidad.

Voz: (con un tono sediento de sangre) Puedo sentir tu ira, Aiden. Está creciendo. ¿Quieres acabar con ellos y liberarte de este tormento?

Aiden: (sonríe con malicia) Sería demasiado fácil, ¿no crees? Quiero que sufran. Quiero ver el miedo en sus ojos, la desesperación mientras se dan cuenta de que no hay escapatoria. Quiero que sepan exactamente por qué están siendo castigados.

Voz: (con un tono oscuro) Pero, Aiden, ¿no crees que prolongar su sufrimiento también prolonga el tuyo?

Aiden: (riéndose con amargura) Mi sufrimiento ya no importa. Lo único que importa es verlos pagar por lo que me hicieron. Quiero que sepan lo que se siente ser abandonado, ser tratado como un monstruo. Quiero que rueguen por sus vidas, como yo lo hice una vez.

Voz: (con un susurro siniestro) Aiden, recuerda, cuanto más te sumerges en la oscuridad, más difícil es volver atrás.

Aiden: (con determinación) No hay vuelta atrás para mí. He cruzado esa línea y ahora estoy del otro lado. La venganza es lo único que me queda, y no descansaré hasta que cada uno de ellos haya pagado.

Voz: (con una risa fría) Entonces, adelante, Aiden. Que sufran tanto como tú has sufrido. Que la oscuridad los consuma, al igual que lo hizo contigo.

Aiden se sumerge aún más en su sed de venganza, alimentando su odio y determinación mientras se prepara para la siguiente fase de su plan. La oscuridad que lo rodea parece abrazarlo, convirtiéndolo en un ser sin piedad, decidido a hacer que todos paguen por el tormento que ha soportado durante tanto tiempo.

Días después.

Aiden se abrirá hido del departamento ya que sabia que la policía descubrío que estaba en ese departamento local, pero les dejo una sorpresa.

Aiden observó desde la distancia cómo su elaborado plan se desarrollaba según lo planeado. La explosión iluminó la noche, creando un caos momentáneo. La voz en su cabeza rió en sintonía con la destrucción, expresando su satisfacción por el resultado.

Aiden: (riendo con malicia) ¡Qué estúpidos son! Se creen tan astutos, pero mira, ahora calcinados.

Voz: (con satisfacción) Bien hecho, Aiden. Esa explosión los mantendrá ocupados por un tiempo. Ahora, ve a la cabaña y prepara tu siguiente movimiento.

Aiden se aleja del edificio en llamas, su risa resonando en la noche. Se dirige hacia la cabaña abandonada, un lugar oscuro y solitario que se convierte en su refugio temporal. Mientras camina, la voz en su cabeza sigue susurrándole ideas siniestras y planes de venganza.

Aiden: (murmurando para sí mismo) Esta vez, los atraparé a todos por sorpresa. No sabrán qué los golpeó.

Al llegar a la cabaña, Aiden entra y enciende una linterna. El lugar está polvoriento y desgastado por el tiempo, pero para él, es un santuario momentáneo donde puede planificar su siguiente movimiento.

Voz: (con una risa oscura) ¿Qué tienes en mente, Aiden?

Aiden: (sonriendo con astucia) Tengo un plan. Voy a jugar con ellos, como un gato juega con un ratón antes de devorarlo. Les mostraré el mismo terror que sentí yo cuando me abandonaron.

Aiden comienza a organizar sus armas y a trazar estrategias. La cabaña se convierte en su centro de operaciones, un lugar desde donde planea infligir su venganza. La voz en su cabeza murmura sugerencias, alimentando su sed de destrucción.

Voz: (susurrando con malicia) Deja que sientan el miedo, Aiden. Deja que se ahoguen en él antes de que los atrapes en tus garras.

La noche cae, y Aiden sigue meticulosamente cada paso de su plan. Cada detalle está cuidadosamente calculado para asegurarse de que cada uno de sus enemigos sufra antes de encontrar su final. Mientras trabaja en la oscuridad de la cabaña, la luna llena brilla débilmente a través de las ventanas, iluminando su rostro con una luz fría y despiadada.

Aiden: (murmurando para sí mismo) Será inolvidable para ellos. Será el principio del fin.

Con esa determinación en su corazón y un odio ardiente en sus ojos, Aiden continúa preparándose para su próxima ofensiva. La venganza se cierne en el aire, y él está listo para desatarla con toda su furia sobre aquellos que lo han herido tan profundamente.