Destinados /RenMin

Epílogo

En el cumpleaños número cinco de los pequeños Huang, un invitado inesperado apareció.

Renjun había preparado todo para que sus bebés tuvieran una hermosa celebración junto a las personas que conocían y a sus nuevos amigos de clase (con los que pasó unos días y ya no están en la escuela).

—¿Johnny? —preguntó Renjun asombrado de verlo después de 15 años.

—Hola, señor Huang Renjun. Después de tantos años nos volvemos a ver. Hiciste llorar a Jaemin más veces de las que pude contar.

El peli plateado sonrió cansado. Cada vez que un antiguo compañero de su clase lo veía por primera vez en años, le decía lo mismo. Era casi una tradición hacer sentir mal al pobre Renjun, pero sabía que se lo merecía.

—Lo sé. Mi esposo jamás deja de repetírmelo.

—Me alegro, mereces sufrir un poco.

Johnny fue hacia el patio trasero y saludó a todo el mundo como los amigos que eran. Renjun suspiró cansado y terminó de preparar los pasteles de los mellizos.

—Renjun —apareció Jaemin, entrando en la cocina bastante agitado—. Apresúrate, Yeon está entrando en pánico porque su papá no está.

El nombrado sonrió, caminando hacia él con las tartas. —¿Solo es Yeon? Yo te veo bastante inquieto.

Jaemin abrió la puerta para él y rodó sus ojos. —No le veo la gracia a tu chiste.

—Perdón —besó su mejilla y caminó hacia la mesa gigante donde los pequeños estaban sentados en el otro extremo.

—¡Papá! —gritaron ambos, enterneciendo a todos—. ¡Pensamos que te habías ido! —confesó el pequeño Yuanfen.

Jeno asintió. —Realmente son hijos de Jaemin.

Todos los invitados rieron y se sentaron en sus respectivos asientos para cantar por los cumpleañeros.

Dio la casualidad que Johnny se sentó junto a Renjun y una vez que terminaron de cantar pudo preguntar al fin lo que lo tenía curioso durante años.

—¿Cómo es que tus padres desaparecieron cuando tú lo hiciste?

Renjun miró al hombre más alto. —Una vez me dijeron que nosotros no teníamos padres y que solo eran cuidadores. Pero ellos eran mis verdaderos padres.

—¿Qué quieres decir, Renjun? —preguntó Jeno frente a él.

—Mi padre era Eleary y mi madre era humana. Fue la última reencarnación de mi padre porque jamás encontró a su destinado o destinada. Pero sé que él ama mucho a mamá. Jamás tuvo hijos aparte de mí, así que no tengo más familia que él y mamá.

Johnny rascó su cabeza. —¿Cómo sabes que eran tus verdaderos padres?

—Cuando desaparecí, mi papá vino a visitarme. Supo de inmediato donde podría estar gracias a Mark. Me contó todo lo que acabo de decir —se encogió de hombros y se levantó de su asiento—. Olvidemos el pasado y enfoquémonos en que el príncipe... el rey Chenle y su esposo Haechan serán padres.

Todos aplaudieron hacia los nombrados.

—¡Oye es el cumpleaños de mis hijos! —se quejó Jaemin, golpeando con suavidad la cabeza de su esposo.

—Perdón cariño. Perdón, bebés. Papá sigue siendo el mismo tonto de siempre.

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Ahora sí, este es el final de "Destinados"

Espero que les haya gustado esta historia tanto como a mí me gustó escribirla.

Muchas gracias por seguir aquí hasta el final y ya nos veremos en otra historia.

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