¡Salva el mundo, Rikku!
Rikku nunca antes había luchado contra alguien así. Participó en el torneo de artes marciales dos veces, luchó contra algunos de los guerreros más valientes que había conocido durante sus viajes por todo el mundo y había entrenado con el Maestro Roshi para divertirse y entrenar. Sin embargo, ella nunca había luchado por miedo a su propia vida y a la de los demás. Cuando miró a Piccolo, tuvo una sensación de protección a su alrededor. Ella cuidaba la Tierra, cuidaba de cada persona y ser vivo. Cuando este tirano amenazó todo lo que ella apreciaba, sintió un enjambre de poder a su alrededor. Todos los moretones y cortes que había recibido en su feroz batalla le dolían, pero para ella no eran nada. Nada iba a impedirle proteger a sus amigos.
El castillo que los rodeaba se desmoronó y cayó por su ferocidad. Sus poderes casi están sincronizados pero sus formas de distribuirlos son muy diversas. Sabía que Tien había estado esquivando escombros y réplicas de su guerra de furia durante casi una hora. Rikku se frotó la rodilla donde Piccolo la había quemado con sus láseres y ella gruñó brutalmente. Utilizó todas las técnicas que había aprendido y trató de mantener la cabeza despejada frente a él. Sin embargo, cuando él eliminó su uso del poste de energía, ella tenía la desventaja de su pierna que la puso en desventaja.
El poder explosivo de Piccolo que había diezmado los terrenos a su alrededor había sido una fuerza impresionante que había sido una experiencia cercana a la muerte y la había dejado con más quemaduras que no le importaba contar. Si no hubiera sido por Tien, habría sido parte del polvo que ahora yacía en el suelo a sus pies. Aunque había pagado un precio por ello. No pudo hacer nada cuando la segunda ola de Piccolo los golpeó a ambos dejándolos medio rotos y quemados. Ella lo miró ahora todavía vivo y observándola esperando que ella lo ayudara. Para ayudar al mundo. ¿Qué iba a hacer ella? ¿Qué podría hacer ella?
"¡Basta! ¡Déjalo en paz!" Podía escuchar el cráneo de Tien comenzando a romperse bajo el agarre de Piccolo. Su ira aumentó y pudo sentir que una cuerda en ella comenzaba a tensarse como si algo estuviera a punto de romperse.
"¡Rikku, olvídate de mí, simplemente destruye este monstruo!"
Su boca se movía por el mundo pero en sus ojos empezaba a sentir que el dolor se detenía. Quería ser salvado o asesinado. Ella no podía soportar verlo.
A poca distancia, Yamcha voló el avión hacia donde se suponía que estaba el castillo y él y las chicas miran hacia el campo de batalla en estado de shock. ¡Todo fue demolido! "¿Qué diablos pasó aquí?"
"La obra de Piccolo sin duda."
"Tengo un mal presentimiento sobre esto. Espero que Tien y Rikku estén a salvo". Bulma miró a su alrededor sintiendo el peligro a su alrededor. "Yamcha, probablemente deberíamos aterrizar y entrar a pie".
"Sí, es una buena idea. Prepárense chicas. Es hora del espectáculo".
Yajirobe miró alrededor del desolado mientras sus ojos se esforzaban en la distancia. "Maldita sea, vine hasta aquí para ver pelear a Rikku y no la veo." Mira hacia abajo al ver el cráter y su voz se tensa al pensar en lo que lo haría. "Esto no se ve bien".
Se subió a su auto con la mente dando vueltas sobre si debía seguir adelante o regresar a casa de Korin. Con el estómago rugiendo, tomó la decisión final de dirigirse con la esperanza de recibir la comida que le debía Rikku. Sus ojos miran hacia un lado viendo tres figuras junto a un avión.
"Me pregunto qué es todo eso."
Rikku miró fijamente con los ojos amenazando con llorar a Tien, quien la miraba indefensa. Ella no podía arriesgar su vida y Piccolo lo usó a su favor rompiéndole el brazo con una piedra y riéndose en su cara. "Mírate llorando como un bebé. Si fueras más como yo podrías superar una pequeña herida como esa."
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Vegeta x Fem Goku
RomanceUna historia de amor de una noche con Vegeta hace que Goku piense qué pasaría si su vida cambiara. Shenron, siendo el Dragón Eterno que es, le concede su deseo y le muestra cómo habría sido la vida si las cosas hubieran sido... un poco diferentes.