My Wild Love © ᵛᵏᵒᵒᵏ [En proceso]

Capítulo 07

Cap. 07 ✔

[Un omega de fuertes convicciones]

Las mañanas nunca habían sido tan agradables para Jungkook como aquel día. Su cuerpo se sentía completamente relajado, gracias al extenso baño que había tomas la noche anterior. Quitar cada mugre de su cuerpo había sido como despojarse de cada uno de sus problemas y preocupaciones, sintiéndose plenamente al terminar.

Luego de que el alfa desapareciera en la oscuridad del lago, el joven príncipe se dispuso a buscar un lugar más apartado, desde donde no fuera tan visible a la hora de despojarse de sus ropas. Algo un poco tonto para él, cuando la persona de la que se escondía, ya había visto todo lo que había para ver. Aun así, mientras se quita la ropa, no podía evitar mirar a su alrededor buscando la presencia de la otra persona, la cual trató de ignorar saltando hacia el agua.

La sensación de su piel, al contacto con la fría superficie, erizaron todo su cuerpo, desde la punta de los pies, hasta los pelos de su nuca, soltando un breve chillido por la sorpresa. Aunque esto no evitó que disfrutara de la plenitud que llegó a él mientras deslizaba su cuerpo al nadar.

—¡Aaa!

¿Desde hacía cuánto que no nadaba de esa forma? Sentirse así de libre, sin ojos que juzgaran o que le dijeran que estaba bien y que no. Sin la carga de verse como omega con clase, que no podía hacer nada inmoral que perjudicar su reputación y prestigio. Algo así como lo que sucedía en esos momentos. Jungkook reía a carcajadas de imaginarse el rostro de su padre si le viera ahora, nadando completamente desnudo a la intemperie y propenso a que su cuerpo fuera mancillado por un alfa sin clase que no sabía ni hablar correctamente. Ni siquiera el color de las manzanas, de hace unas horas, podrían igualar la cara de su progenitor; este acostumbraba a enrojecer de la ira hasta que parecía a punto de un ataque al corazón o algo parecido.

Luego de varios minutos, casi horas, Jungkook se decidió por salir justo antes de que Taehyung se apareciera entre la negrura, esta vez ocupando ropas nuevas y con la noticia de que la comida estaba lista.

Jungkook por primera vez había degustado lo que era comer carne cocinada en una fogata, aunque no estaba bien cocida y no contaba con especias ni condimentos, estaba bastante aceptable a su paladar y su estómago lo recibió con mucho gusto. Tanto tiempo de comer solo frutas había hecho una fuerte demanda a algo con más calorías, tanto que con solo oler la carne su boca se llenó de saliva.

Esa noche había dormido más cómodo de lo que recordaba. Con el cuerpo completamente aseado y el estómago lleno hasta explotar. Por eso, al despertar, su sonrisa no desapareció por varias horas. Se sentía tan bien que ni siquiera se había percatado de que el alfa no estaba a su alrededor.

Había permanecido desde el amanecer recostado sobre la cama del alfa, mientras se dedicaba a soñar despierto.

En su imaginación, no se encontraba dentro de una cueva en una isla desierta, sino que estaba allá, en Solaris. Su sueño siempre había sido visitar los campos de tigrada, sentirse rodeado de esas flores que tanto significaban para él, tanto que varias veces había pensado en usar los métodos antiguos para marcar su cuerpo, deseaba poder retratar aquella flor en su piel, así como se encontraba en su alama.

Cuando por fin despertó de esa neblina de pensamientos en la que se encontraba, se dio cuenta de que en algún momento de la noche Taehyung le había vuelto a curar las heridas, que aún no estaban recuperadas del todo. Y después de un momento en el que se perdió otra vez en la vergüenza de ser visto desnudo por el azabache, decidió incorporarse y salir en su búsqueda, al percatarse de que no se encontraba cerca, gracias a que su olor parecía distante, casi imperceptible. Aseguraba de que este no se encontraba dentro de la cueva, más bien parecía que se había ido hacía mucho tiempo.