capítulo nueve

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capítulo nueve ; pesadilla

Cuando se topó con los ojos fríos de Malfoy, supuso que algo malo había sucedido

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Cuando se topó con los ojos fríos de Malfoy, supuso que algo malo había sucedido.

Todo el mundo había salido de la sala común para llegar a sus respectivas clases, y los oídos de Aridae se llenaron del siseo de la serpiente de piedra que hizo desaparecer la entrada de la sala, fundiéndose con los ladrillos oscuros y fríos que conformaban el suelo de las mazmorras cuando ella, junto con Pansy, se alejaron de la puerta.

Iban un poco tarde, pero su intención de correr por las grandes escaleras hasta llegar al aula de Transformaciones fue interrumpida por su compañero, quien se interpuso en su camino con el rostro amargado y los brazos cruzados. Pensó en ignorarlo, en pasar de largo y creer que su molestía no iba dirigida hacia ella. Quizás está esperando a Pansy; Pensó luego de no encontrar razones por las que Malfoy la estaría esperando.

    —Blackwood—La llamó, con el mismo tono mandón que usa con los alumnos de años inferiores o los de otras casas, aprovechándose de su título de prefecto.—Acompañame.
    —¿Necesitas algo? Vamos a llegar tarde a-...
    —No me interesa a donde llegues tarde. Me dijeron que viniera por tí, así que vamos.

Pansy arqueó una ceja, curiosa por no saber las razones por las que Draco hacía la labor de un mensajero.

    —¿Quién la solicita, Snape?—Le cuestionó, cruzándose de brazos.
    —Luego te digo. Ahora no tengo tiempo.
    —Yo tampoco tengo tiempo de lo que quieras hacer, Malfoy—Respondió Aridae mientras acomodaba la correa de su bolso sobre su hombro.—Si llegamos tarde nos bajarán puntos, no creo que ambos prefectos den una buena imagen faltando a clases.
    —Quéjate de eso con Snape y Dumbledore entonces. Yo no vine a seguirte como un cachorrito como lo hace Nott.

Ante esa respuesta, una sensación de malestar se instaló en el cuerpo de la castaña, recordando que no había visto a Theo en la sala común mientras esperaba a su amiga para salir. Pansy soltó un escandaloso suspiro que la hizo regresar a la tierra.

    —¿Y no necesitas que los acompañe? Te recuerdo que soy prefecta como tú, deberías mantenerme informada de las cosas, Draco.
    —Mejor ve a revisar si los de primer año portan bien el uniforme—Respondió tajante antes de darse la media vuelta y empezar a caminar.
    —Idiota—Murmuró la pelinegra entredientes antes de mirar a Ari.—Al rato me cuentas, ¿De acuerdo?

La castaña únicamente asintió antes de empezar a seguir a Draco fuera de las mazmorras. Los dos se mantuvieron en total silencio mientras el rubio se dedicaba a empujar a unos cuantos alumnos para abrirse paso en los escalones de la Gran Escalera, la cual apenas se detenía unos segundos antes de seguir girando. Aridae tuvo que apretar el paso hasta llegar al lado de Malfoy para no quedarse atrás.

El interior de la joven se quema de curiosidad por saber qué es lo que el jefe de Slytherin y el director quieren con ella, pero se muerde el labio inferior para retener la pregunta en su boca, sabiendo que Malfoy ya se habría burlado si supiera lo que estaba ocurriendo. Aunque ni siquiera ella estaba segura de lo que pasaba.

VIOLENT DOGS ; mattheo riddleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora