Capítulo 5

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-M-más fuerte.- pidió el peliblanco, gimiendo fuertemente cuando Doyoung aumentó la velocidad y fuerza.

Había pasado dos semanas desde su "plática sentimental" y el pelinegro estaba más atento con él. Hasta sonaba raro decirlo.

Ahora hacia todas las comidas con él, de vez en cuando tomaban juntos el té, visitaba su habitación casi a diario, ¡incluso le habían comprado un vivero! Era un vivero tranquilo y con una variedad impresionante. Casi muere ahí mismo.

Sin embargo, una tormenta en su pecho impedía que el aíre se adentrara en él, su lado razonable le decía que todo era muy bueno para ser real, pero su lado primitivo le decía que todo estará bien y que tal vez lograría tener un matrimonio feliz con Doyoung. Y por el momento, ese lado estaba predominando poco a poco en él.

-Mierda...- Jadeó el mayor, corriéndose dentro de él. Y sin pensarlo dos veces, el peliblanco lo acercó para poder besarlo.

Doyoung colocó una mano suavemente en su mejilla mientras que la otra estaba a la altura de sus costillas en el colchón.

El mayor se separó de él cuando ambos se quedaron sin aire, se recostó a su lado, tratando de controlar su agitada respiración. Jungwoo hizo lo mismo, formando un silencio ameno en el que solo predominaba las respiraciones irregulares de ambos.

-Eres agradable.- soltó el adolescente repentinamente.

Doyoung soltó una ronca risa, inesperadamente.

-¿Tan repentinamente?.- preguntó, dándole la cara a Jungwoo.

-Repentinamente, pero no te emociones, solo por el momento.- Jungwoo lo miró, el pelinegro sonrió un poco. La típica sonrisa peculiar que poseía.

-No importa, me emocioné de todos modos.- El peliblanco sonrío, era la confianza, habilidad y destreza de Doyoung que le causaba curiosidad y gracia a Jungwoo.

Doyoung le correspondió la sonrisa, levantando la mano para colocarla suavemente en su mejilla, su dedo pulgar empezó un recorrido por su rostro, deteniéndose en su labio inferior.

-Eres muy cautivante.- Los intensos ojos de Doyoung recorrieron su rostro, con esa mirada intensa y depredadora.- Me dejas sin respiración.

Jungwoo sintió su rostro arder. Y sin realmente razonar, se acercó a su esposo y juntó sus labios.

Doyoung posicionó su mano posesivamente en su cintura, para acercarlo más. Jungwoo colocó su mano delicadamente en la pálida mejilla. Sintiendo el hormigueo en su vientre bajo volver cautelosamente.

Tal vez estaba enloqueciendo. O tal vez había caído en las sofocante redes del pelinegro.

                            ⚫⚫⚫

-He visto que las cosas mejoraron entre el príncipe Doyoung y usted.- Comentó Wendy, rompiendo el cómodo silencio entre ambos.

-Algo parecido, si. En realidad tuvimos una interesante plática en el jardín delantero hace unas semanas. Y desde eso se volvió tan...atento.- Jungwoo cerró brevemente los ojos cuando Wendy frotó suavemente sus hebras con shampoo.

-¿Y eso le complace a usted?.-

-Es muy diferente a como era los primeros meses. Pero siendo él mismo sigue teniendo ese comportamiento meticuloso y peculiar, pero si, no me molesta en lo absoluto.

-Bien, si usted se siente cómodo con eso, está bien.- Wendy le sonrío cariñosamente.

10 minutos después salió de la bañera, Wendy lo ayudó a vestirse y arreglarse para el día. El padre de Doyoung le había comentado el día anterior que tenía una notica importante que darles, por lo que tenía que bajar y estar presentes con ellos.

-Gracias, Wendy.- Jungwoo le sonrío. Wendy hizo una reverencia y dejó la habitación.

El peliblanco se miró en el espejo, acomodando sus cabellos. Soltó un suspiró y se dirigió hacía el comedor.

Cuando se adentró pudo ver a Doyoung en la mesa dándole un sorbo a su té de granada.

-Buenos días.- saludó con voz suave, se sentó enfrente del pelinegro, quien le sonrío.

-¿Dormiste bien?.- preguntó.

-Lo hice, ¿y tú?.- el peliblanco agradeció con una sonrisa cuando le sirvieron su característico té de lavanda.

-Algo así, tuve un sueño.-

-¿Qué fue?.-

-Soñé que estaba en el jardín contigo, pero al rededor solo habían rosas rojas. Fue bastante peculiar en realidad.- dijo, restándole importancia. Jungwoo iba a comentar algo al respecto, sin embargo tuvo que levantarse para darle una reverencia al Rey.

-Buenos días.- Siwon tomó asiento en la silla de en medio.- Café.- ordenó con voz fuerte, Jungwoo trató de no hacer una mueca ante la notable arrogancia de su suegro. Doyoung solo sonrío ladinamente.

-¿Qué era la noticia tan importante que querías darnos?.- preguntó el pelinegro ni un instante después.

-La coronación.-

-¿Coronación?.-

-Si, ambos serán coronados, les daré mi bendición real. Así cuando deje el trono, podrán ascender como monarcas reales.- 

-Había olvidado todo ese circo.- soltó el pelinegro, visiblemente fastidiado.

-¿Cuándo es?.- preguntó el adolescente.

-En una semana. Lunes, estarán los señores reales y letrados importantes. Por lo que todo tiene que salir impecable.- Siwon le dió un sorbo a su oscuro café.

-Es obvio que saldrá impecable. ¿No confías en nosotros?.- preguntó Doyoung.

Jungwoo sintió un repentino tirón en su estómago.

-No lo sé, han estado teniendo problemas.-

-Eso era antes. Estamos bien actualmente.- afirmó con arrogancia.

-Bueno, espero que sigan así, porque no necesito un dolor extra de cabeza.-

-Confía en mi. Sabes que yo....- Ambos fueron interrumpidos cuando el peliblanco se puso de pie y salió corriendo hacía el baño más cerca.

Unas náuseas violentas y un vómito inexplicable salió de su garganta. Sus ojos se llenaron de lágrimas y su garganta empezó a arder.

Una vez que se detuvo, soltó la llave del inodoro y se limpio la boca. ¿Qué diablos fue eso?.-

-¿Jungwoo? ¿Estás bien?.- preguntó su esposo.

Jungwoo se cepilló los dientes. Y una vez listo, salió del baño, avergonzado y con los ojos vidriosos.

-Eso creo.- El peliblanco miró al Rey.- Realmente no fue mi intención, lo lamento.

-Te ves pálido, Wendy te llevará a tu habitación. No puedes estar enfermo la próxima semana.- El Rey le dio una última mirada.- Vamos.

Doyoung besó su frente y siguió a su padre. El peliblanco caminó hasta las escaleras con las manos en su estómago. Wendy estaba ahí, lo ayudó a subir las escaleras para que llegase a su habitación.

Jungwoo cerró los ojos con pesar, deseando recuperarse pronto y encontrar explicación a su malestar.

PATIENS ▫️DOWOO▫️NCTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora