No había dormido tan bien hace demasiado tiempo, sobre todo estas semanas. No quiero pensar que haya sido gracias a Cole. Parecía una mañana bastante tranquila así que decidí ir a correr. Me puse mi ropa de deporte y salí de mi habitación. No me lo podía creer. Una chica estaba saliendo de la habitación de Cole. Perfecto. No le di mucha importancia y bajé. Estaba Nathan sentado en las escaleras de fuera.
—¡Hola! ¿Tu corres?—me preguntó
—Sí, me ayuda a despejarme—dije contestando a su pregunta
—A mi me ayuda a escapar a veces cuando no estoy bien. ¿Corremos juntos? Me hato a los cordones y estoy listo.
—Esa es amiga de Erin, ¿verdad?
—Sí. No quiere que se entere nadie de que trae chicas a casa. Mi padre sería capaz de matarle.
—Sí, ¿pero por qué es tan...?
—¿Tan hombre?—terminó la frase por mí.
—Pero tu también lo eres. Y no veo que hagas eso
—Cole, es así de único—dijo con tono cansado—ya te acostumbrarás al mundo de Cole. Cuando vives con él no tienes de otra. Aunque no siempre fue así—justo salió él acompañado de Danny
—Has madrugado—me dijo
—Igual que tú—bostezó—Noche cansada, ¿verdad?—era una indirecta
—Denna, yo...—será hombre, pero las indirectas las pilla
—¿Estás listo, Nathan? Voy a empezar—sin esperar respuesta de nadie me puse a correr.
—Joder, tío—Danny se rió de él y le golpeó en el hombro. Poco después Nathan me alcanzó
—Cole era el mejor jugador del condado, pero se rompió la pierna el invierno pasado—me empezó a explicar mientras corríamos— Y ya no puede jugar. El fútbol era su vida. Eso lo cambió mucho.
—Entiendo que pudiera ser impactante para él. Pero eso no le da el derecho de ser un capullo toda su vida—suspiré—Lo siento, he tenido una mala mañana
—Te entiendo, y tienes razón. Pero así es él. Tienes que tener paciencia con él—el resto del camino estuvimos hablando de otras cosas. Llegamos y vi que Cole se estaba acercando
—Vete entrando—le dije a Nathan. Llegó Cole a mi lado—Gracias por habernos esperado ayer.
—Si, eso...—dijo mientras se rascaba la cabeza—Tendría que haber esperado. Lo siento. No fue un buen día. Pero puedo compensártelo. Sígueme—no tuve opción porque me cogió de la muñeca y me llevó a un recinto donde estaban los caballos. Uno de ellos se acercó—Hola...—le dijo al caballo y se subió a la valla—Pásame la comida. Con la mitad basta—cogí la pala y la llené a la mitad, como me dijo, y se la di. El caballo sacó la cabeza por la valla. Era precioso—¿Sabes montar?
—No. Pero es algo que me gustaría hacer. Me encantan los caballos, de echo, es mi animal favorito
—Pues has venido al sitio indicado—ambos reímos
—Parece que tu si sabes
—Llevo encima de un caballo desde que tengo memoria. Ella es Natilla, es un amor.
—¿Natilla?—me reí
—No me juzgues. Se lo puse cuando tenía seis años
—Le viene perfecto...—dije mirando a Natillas
—Toma, dala de comer—me ofreció la pala y la cogí. Se la acerqué a Natilla pero relinchó—Tranquila, estás bien—la calmó y pude darla la comida.
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Mi vida con el chico Walter||Cole Walter
FanfictionJackie y Denna tienen que mudarse tras la pérdida de sus padres. Pasan de vivir en nueva York a un pequeño pueblo de Colorado, pero vivir con los Walter no era tan malo como esperaban. Sobre todo, por ese Walter. 🥀 Lenguaje español 🥀Faltas de ort...