Mi vida con el chico Walter||Cole Walter

009

Me desperté antes que Cole y me quedé mirándole. Transmitía paz. Su respiración era lenta y pausada. Unos mechones rubios le caían en la cara y se les aparté. Se despertó.

—Buenos días—le dije sonriendo.

—¿En qué estabas pensando?—me preguntó.

—En nada...

—Denna... Te conozco lo suficiente para saber que algo te ocurre.

—Tengo miedo de... esto—nos señalé a los dos—Tengo miedo de ser una más—me sinceré—La primera vez que nos besamos no me hablaste en días...—Cole iba a hablar pero alguien llamó a la puerta.  

—¿Estás despierta Denna?—dijo, ¿Will?            

—¿Que hago?—me preguntó Cole susurrando.

—Vete al armario—le contesté a Cole susurrando también—¡Pasa Will!—entró a mi habitación—¿Qué haces aquí?

—Justo venía a hablarte de eso. Haley y yo no estamos pasando por nuestro mejor momento y me quedaré aquí unos días. Para que no se te haga raro verme aquí en casa.

—Está bien—se iba a ir—Espero que lo arregléis pronto—me dio una sonrisa de agradecimiento y cuando se fue salió Cole.

—Así que mi hermanito perfecto tiene problemas de pareja.

—Déjale—le tiré una almohada.

—Me voy antes de que alguien más entre—y se fue sin decir nada más.

Bajé a la cocina para desayunar, tenía hambre. Me preparé un chocolate caliente y entró Katherine a la cocina.

—¡Denna! ¿Qué te ha pasado en la cara?—me tocó la cara y me empezó a escocer. No sabía que decirla.

—Ayer se cayó—apareció Cole por la puerta de la cocina—Se estaba haciendo de noche, y en ved de entrar por la puerta intentó saltar la valla y cayó de cara. Menos mal que estaba cerca.

—Contigo quería hablar señorito. Algo me ha llegado de lo que pasó anoche.

—Yo no he echo nada, tendrías que hablar con Alex.

—De eso ya se está encargando tu padre—justo George entró por la puerta trasera.

—¿¡Desde cuándo metes a chicas a casa!?

—¿¡Qué!?—gritó ahora Katherine.

—Tendremos que poner una cámara en la puerta de la entrada.

—Así evitaremos que haya un desfile de chicas por la noche.

—Vale, ya no lo hago. Así que...—dijo mirándome.

—Así que es verdad—dijo George.

—Mierda.

—Denna, será mejor que salgas. Tenemos que hablar seriamente con Cole—yo me fui—Espero que tengas cabeza y hayas usado protección. No podemos mantener ahora mismo un hijo tuyo.

—¡Mamá!—salí de casa para no escuchar la conversación. Alex estaba entrenando con el caballo. Dentro de poco se acerca algo importante para él y necesita entrenar mucho.

Por primera vez no sabía que hacer. Ahora iría a hablar con Jackie pero no está. La llamé pero no me lo cogió... Me fui a mi habitación para cambiarme y preparé mi mochila. Nos montamos en el coche y Cole nos llevó a clase. Estaba guardando mis cosas en la taquilla y se acercó Alex.

—Oye, ¿Qué tal está mi hermano...?

—¿Ahora sí que te preocupas por él? Podrías haberlo echo ayer, antes de lanzar tu puño a su cara. Acabé yo peor que vosotros.