Capitulo 7

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Jungkook llevó a Taehyung a la sala de su casa, pues la fiesta de su cumpleaños se estaba realizando en el jardín, por lo que el interior de su hogar era un lugar perfecto para estar a solas con el lindo castaño.

-¿te ofrezco algo de beber?- El azabache le preguntó mientras lo invitaba a tomar asiento.

-claro, me encantan los cocteles, te aceptó un Martini-

-perfecto- se alejó hacia la cocina para preparar lo que el chico bonito le  pidió, mientras Taehyung observaba minuciosa y detalladamente cada arreglo que esa casa tenía, aunque la verdad no le sorprendía para nada ver valiosos jarrones que adornaban la sala, ni costosos cuadros que colgaban de las paredes, estaba más que acostumbrado a eso, pues sus padres también eran seguidores apasionados del arte y todo lo que tenga que ver con la elegancia y distinción, por lo que su casa estaba repleta de las obras más costosas del mundo.

Pensar en eso le dio dolor de cabeza, odiaba esa parte de sus padres, ¿Por qué gastar tanto dinero en algo tan estúpido como eso?, Taehyung siempre se hizo esa pregunta desde que era un niño pero simplemente nunca encontró ninguna respuesta lógica, y talvez por eso y muchas otras diferencias no tenga una buena relación con sus progenitores, porque definitivamente ellos son muy distintos.

-Regresé- el azabache lo sacó de sus pensamientos cundo le extendió la copa de Martini -espero te guste, aunque debo decirte que no hay nadie que preparé  los cocteles mejor que yo, soy un experto y me siento muy orgulloso de serlo-  le dedicó una gran sonrisa.

-vaya, me gusta tu confianza, lo probaré y te daré mi opinión, aunque debo advertirte que soy muy exigente- le regaló una sonrisa coqueta.

Jungkook lo miró fascinado, ese chico tenía todo lo que lo enloquece en una persona, era sexy, coqueto, audaz, guapo, hermoso desde cualquier ángulo que se lo mire.

-Wow, este chico es el hombre  más hermoso del mundo- pensó, estaba totalmente seguro de eso y así haya alguien que opine lo contrario, el no estaba dispuesto a discutirlo porque estaba seguro de que su belleza era única e inigualable.

-¿te gustó?- le preguntó totalmente perdido en su mirada y sintiéndose como un estúpido.

 ¿Por qué un simple gesto de ese chico lo estaba enloqueciendo? eso jamás le había pasado, pero ahora puede decir que solo con verlo beber de su copa y pasar ligeramente su lengua por uno de sus labios lo estaba excitando.

-esta rico, me gusta-le respondió -¿me sirves más?- le extendió la copa, balanceó su pie y golpeó con la punta de su zapato ligeramente el pie del azabache mientras le regalaba una picara sonrisa.

Jungkook sintió que por unos momentos se desconectó de la Tierra y su mente voló en un viaje astral a alguna dimensión desconocida.

Tae sonrió internamente, se estaba divirtiendo con el azabache, no podía creer que con cosas tan simples lo estaba enloqueciendo, y cabe mencionar que estaba usando el nivel uno de coquetería, no quería pensar que iba a pasar cuando vaya subiendo de nivel.

-¿no me vas a servir?-

Jungkook reaccionó torpemente, pero luego de unos segundos le respondió.

-claro, me alegra que te haya gustado- maldijo por lo bajo, se sentía un completo estúpido, y el jamás era así, en sus citas el era quien ponía nervioso a sus conquistas, nunca al revés.

Se quitó el saco que adornaba su traje, y se quedo con un chaleco que resaltaba su pequeña cintura y dejaba expuesto sus fuertes músculos. se acercó al bar que tenía en la esquina de su casa y preparó más cocteles, uno para el lindo castaño y otro para el. Tae abrió los ojos con gran asombró al ver lo bien trabajado que ese chico tenía su cuerpo.

Tentación ♡KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora