𝟎𝟖

305 53 6
                                    

"Stranger

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Stranger."

[🌊. . 🔥]



NARRADOR: OMNIPRESENTE






Kassia miraba su alrededor llena de curiosidad. Tenía 8 años, y estaba aburrida en casa así que había decidido salir al parque que quedaba a una cuadra. En frente suyo, o bueno, del parque donde estaba. Había un edifico antiguo, y ya había contado todos sus pisos más de tres veces.

Bajo su vista al suelo mientras el columpio se balanceaba y luego echó su cabeza hacia atrás y cerró los ojos, dejando que la brisa revolviera su cabello amarrado en una cola de caballo. Sonrió sintiéndose feliz; y extrañando a su padre.

Alzó la cabeza de nuevo y empezó a ver a los niños que corrían por ahí, las palomas que estaban siendo alimentadas por ancianos y los pequeños que estaban en el subibajas. Empezó a verlos a cada uno con cuidado y disimuladamente volteo a ver a la niña que se columpiaba a su lado.

Tenía rizos rubios, y ojos azules como el cielo. No se había dado cuenta que la analizaba, ya que tenía a su madre a unos metros de ella y conversaban, al verla sonreír juguetonamente le recordó a su padre cada que hablaba con ella. Pensó que sería una buena hija de Apolo al ver cómo estiraba una de sus manos hacia el sol.

Porque si, ya habían tres semanas desde que su padre le había contado la "verdad" sobre su madre. Y pensó que estaban locos, pero luego imagino lo emocionante que sería tener a una madre con poderes mágicos y se le pasó.

Y más porque su papá le dijo que siempre la veía en todos lados, y que si era muy observadora, alcanzaría a hacerlo también, él le decía que podía estar en todas partes. En los árboles, en una suave brisa, o en las pisadas que dejaba atrás.

Eso podría estar en una canción; tal vez debía escribirlo en algún lado.

El punto es que, el simple hecho de que podría conocer a su madre alguna vez la motivo lo suficiente para aceptar sus orígenes con orgullo. Y más porque su padre le dijo que no todos los niños tenían sus "habilidades" y que por eso no debía contárselo a nadie. Se sintió única y especial, así que amo más a su mamá.

Hestia, diosa del hogar y la calidez. O algo así.

Su mamá.

Vio a lo lejos como un niño salía de un callejón oscuro al lado de aquel edificio, era pelinegro hasta donde podía ver. Parecía apresurando por llegar al parque, porque ni siquiera miró antes de cruzar la calle para llegar allí.
Odiaba sufrir de miopía y no haber traído sus lentes, porque no lo veía bien y aun de lejos le causaba curiosidad su rostro de acontecido.

Parecía asustado. ¿Habría perdido a sus padres?

Al llegar a la acera del parque pareció buscar algo, y por un momento el tiempo se detuvo al ver sus ojos. Los había cruzado con los de ella, y vio unos orbes verdes que le recordaron al agua del mar cuando le daba el sol. Eran bellisimos, nunca había visto nada igual. El niño apartó la mirada y vio el columpio en el que estaba.

𝐌𝐘 𝐓𝐄𝐀𝐑𝐒 𝐑𝐈𝐂𝐎𝐂𝐇𝐄𝐓 -  𝗣𝗲𝗿𝗰𝘆 𝗝𝗮𝗰𝗸𝘀𝗼𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora