░ ࣪ 🌻.ꦿ𝑀𝑎𝑚𝑎́ 𝐿𝑢𝑐𝒉𝑜𝑛𝑎 ⿻ [EN EDICIÓN]

𝙲𝚊𝚙 ②

Ya había pasado una semana desde que Midorya Izuku empezó a trabajar cuidando a su pequeño y hasta ahora todo iba bien, de hecho, demasiado bien. Su cachorro parecía adorar la compañía del chico y se divertía junto con él dándole tiempo a descansar cuando llegaba a casa hecho polvo.

Acostumbrarse a su nuevo trabajo era difícil, gracias a la ayuda de Uraraka también pudo conseguir un trabajo limpiando casas en una compañía. No mentiría, era un trabajo bastante duro, los clientes no siempre eran agradables y muchas de las casas que debía limpiar eran demasiado grandes para él solo. Aún así se esforzaba dando todo de sí motivandose con la hermosa sonrisa de su pequeño que le esperaba en casa.

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- Ya llegué... - Anunció el omega entrando en el departamento, todo su cuerpo dolía por haber estado trabajando y le costaba mantenerse de pié, pero aún así no podía permitir que le vean vulnerable.

- Bienvenido. - Frente a él se encontraba el alfa que cargaba a su pequeño en brazos con una enorme sonrisa.

- ¡Babá! - Gritó el infante extendiendo sus manitas hacia su madre y este rápidamente fue a cargarlo para llenar su rostro de besos.

- Ay mi cosita bella... ¿Te portaste bien hoy, Hika? - Preguntó abrazando al bebé que asintió correspondiendo el abrazo con todas las fuerzas que era capaz de ejercer, a pesar de todavía no cumplir el año era un pequeño muy inteligente.

- Hikaru y yo estuvimos viendo animados en la tarde y jugamos con los bloques, también se comió ya su cena, estaba a punto de ponerlo a dormir pero se negaba porque quería esperar a su madre.

Le informó el peliverde enternecido con la escena del par, su mayor sueño siempre ha sido poder tener su propia familia y vivir momentos como ese, pero por ahora solo podía conformarse admirandolos desde la distancia.

- Gracias, Deku-kun. - Le respondió riendo, aquel era el apodo que su pequeño le había dado al joven y el omega se encargaba de repetirlo para molestarle.

El alfa frunció el ceño pero dejó pasar el apodo y entró hasta la sala seguido por el mayor.

- También preparé comida para usted, supuse que llegaría tarde y no tendría tiempo para cocinar. - Dijo mostrandole la mesa que estaba servida con los platos de comida tapados.

- Oh... no tenías que molestarte, solo te pago para cuidar de Hikaru y...

- No es molestia, me gusta mucho cuidar de Hikaru y esta es mi forma de agradecerle por darme este trabajo. - Respondió con una sonrisa.

Apenado el omega dejó a su pequeño en su andador ya que este aún no caminaba y se sentó en la mesa.

- Está bien, gracias... pero al menos siéntate a comer conmigo, estoy seguro de que aún no has cenado.

- No, no, yo ya co... - Su estomago rugio como si de una bestia salvaje se tratara y todo se quedó en silencio hasta que Hikaru soltó una sonora carcajada.

- Vamos, siéntate a comer. - El alfa obedeció y sonrojado se sentó a su lado.

Bakugou destapó los platos y le dio uno al alfa, la comida se veía... bueno, no se veía muy bien que digamos.

- Emm... ¿Esto es...? - Preguntó examinando los platos sin lograr encontrarle forma.

- Sopa, arroz y omelet. - Respondió sonriente y el omega hizo una mueca mirando la sopa que más bien era una pasta marrón al igual que el omelet carbonizado, y estaba seguro de que si volteaba el tazón de arroz al revés nada caería. - ¿Qué pasa? ¿Se ve muy mal? - Preguntó preocupado haciendo ojos de cachorrito tras ver su expresión disgustada.

- N-No.. está bien así.

No estaba nada bien, temía que si probaba aquello terminase intoxicado, pero el alfa se había esforzado tanto preparándolo que se sentiría mal si no lo aceptaba. Así que al final inseguro tomó el primer bocado del omelet ya que era lo que parecía más comestible y el sabor a quemado inundó su paladar provocandole deseos de vomitar, afortunadamente logró contenerse.

- Tiene un sabor... interesante. - Dijo finalmente ante la mirada expectante del alfa y este tras sonreír empezó a comer de su plato devorando el contenido en cuestión de segundos.

<¿Cómo puede comerse tan fácil algo como eso?... No es normal.>

Katsuki probó las otras cosas que sabían igual o más asquerosas que el omelet y al final se decidió por fingir que estaba lleno diciendo que había comido en el camino.

<Nueva nota mental: "Nunca más dejar que Deku cocine.">

El alfa se puso de pié y retiró los platos para dejarlos en la cocina, desde que el omega había llegado tenía en mente proponerle algo, pero aún no encontraba las palabras para hacerlo.

- Emm... - Empezó a decir dándose la vuelta para mirarle ya que Katsuki aún se encontraba sentado en la mesa observando con ternura como su pequeño jugaba.

- ¿Mm? - Miró al joven alzando una de sus cejas, este parecía nervioso y extrañamente sonrojado, supo que quería decirle algo así que se quedó mirándole a la espera de ello.

- Katsuki... ¿Tienes este domingo libre? - Preguntó finalmente dejando al omega confundido.

- Sí, es mi día libre... ¿Por qué? - Su mirada era penetrante intentando adivinar que era lo que quería decirle, mirada que solo conseguía poner mucho más nervioso a Midorya.

- Bueno... yo... un amigo me dio unos voletos para Kapibara-land, el parque de diversiones, este fin de semana habrán actividades infantiles y me preguntaba si querías ir conmigo... y llevar a Hikaru, por supuesto.

Sus mejillas parecía que iban a explotar en cualquier momento, Katsuki no entendía porqué reaccionaba de esa forma, de hecho, muchas veces le era difícil creer que era un alfa debido a su forma de actuar, si no fuese por sus evidentes feromonas y lo bien dotado de su cuerpo habría dado por hecho que era un beta.

- Oh... claro, sería divertido. - Aceptó despreocupado y los ojos del alfa se iluminaron mostrando una gran sonrisa.

No habría problema por tener un día de descanso... ¿verdad?

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¡Holis! Soy yo de nuevo. Espero les haya gustado este segundo capitulo, pronto estaré publicando la continuación.
No duden en decirme sus opiniones en los comentarios.
Sin más que decir me despido, besitos. <3

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