░ ࣪ 🌻.ꦿ𝑀𝑎𝑚𝑎́ 𝐿𝑢𝑐𝒉𝑜𝑛𝑎 ⿻ [EN EDICIÓN]

𝙲𝚊𝚙 ⑤

— ¿Hablar? ¡Ha pasado un jodido año, Kirishima y tienes el descaro de aparecerte aquí como si nada para "hablar"!

Gritó perdiendo los estribos, no le importaba si los vecinos le escuchaban o el rostro sorprendido del alfa que dejaba notar el desagrado y arrepentimiento debido a su actitud.

— No has cambiado nada, Baku... — Esa fue la gota que colmó el vaso.

— ¡Vete a la mierda! ¡Me dejaste muy claro que no querías saber nada de mí o de tu hijo cuando me entregaste aquellos papeles de divorcio, ahora yo no quiero saber nada de ti! ¡¡VETE DE AQUÍ!! — Intentó cerrar la puerta una vez más pero al igual que la primera vez fue retenido.

— Escúchame, por favor... — Insistió el pelirrojo acabando con los nervios del omega, el pequeño en los brazos de este había empezado a llorar y lo único que deseaba era que ese hombre se fuera. — Yo no quería que las cosas terminaran así, nunca pensé que terminarían así yo solo...

— ¡Ya te dije que no quiero escucharte! ¡Vete de aquí! — Los llantos del bebé ahora eran más audibles y varios vecinos chismosos habían abierto sus puertas en busca de respuestas para comprender todo aquel escándalo.

Kirishima trataba de abrir la puerta a ampujones mientras Bakugou hacía todo lo posible para cerrarla. Hasta que la mano del alfa fue retirada con fuerza dejando a todos confundidos con la repentina aparición de una tercera persona.

— ¿No lo escuchaste? Te dijo que te vayas. — Midorya en un inicio había decidido mantenerse al margen pero no pudo aguantarse más, la rabia recorría todo su cuerpo ante la escena y no se consideraría alfa si se quedaba con los brazos cruzados ante todo aquello.

— ¿Y tú quién eres? — Preguntó el pelirrojo ofendido, liberando su mano del agarre que le tenía apresado.

— Yo soy su alfa, la pregunta aquí es.. ¿Quién eres tú? — Todos los presentes se quedaron petrificados con sus palabras, ni siquiera Midorya se creía lo que acababa de decir, pero aún así no estaba dispuesto a hecharse atrás.

El ambiente se volvió intenso con las feromonas de ambos alfas que se retaban con la mirada, hasta que finalmente Kirishima rompió con ese vínculo para mirar al omega.

— ¿Es eso cierto? — Bakugou que aún se encontraba en shock le miró arrogante antes de tomar a Midorya del brazo y jalarlo hacia el interior del departamento.

— Sí, así que ahora lárgate. — Sentenció y sin esperar respuesta le cerró la puerta en la cara aprovechándose de su conmoción.

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— Gracias... — Dijo el omega mientras le entregaba una taza de chocolate al alfa. — Gracias por todo.

Luego de lo sucedido Midorya se ofreció para quedarse a hacerle compañía y este aceptó ya que sinceramente no tenía ningún deseo de quedarse solo y desprotegido después de todo lo que había pasado. Por tanto ahora se encontraban ambos sentados en el sofá de la sala buscando alguna forma de relajar el ambiente.

— Es lo que haría cualquiera, no tienes que agradecer, no podía simplemente quedarme sin hacer nada después de ver aquello. — Respondió mirando fijamente su taza y sopló el contenido caliente.

— No, estoy seguro de que cualquiera no haría lo que hiciste, fuiste el único en ir a ayudarme, así que déjame darte las gracias. — Tocó la pierna contraria en un acto inconsciente por formar un vínculo entre ambos y le sonrió de una forma tan dulce que provocó que se sonrojaran las mejillas del alfa.

Al percatarse de su reacción fue consciente de que tal vez se estaba acercando demasiado y también sonrojado se puso de pié.

— Bu-Bueno, seguro que no has comido aún nada, iré a preparar algo de comer. — Informó y sin esperar respuesta caminó hasta la cocina.