Al final del día, siempre termino pensando que tengo fé en la vida, en la humanidad, en la gente, en la bondad, en el mundo.
Y creo en todo porque creo en mí.
Creo en el mundo porque creo en mí.
Sin mí, no hay mundo, sin mundo, no soy yo.
Entonces, mi respuesta se responde sola: sin un yo no hay todo, sin todo no hay yo.
Soy parte de un todo, parte de un ciclo.
Si no me doy importancia a mi misma, no podrá importarme el mundo.
Y si no me importa el mundo, no me importaré yo.
Porque soy tan importante como el mundo y el mundo es tan importante como yo.
No me divido, ni me pierdo a mi misma, solo me hago una con la dualidad.
Porque el mundo y yo, siempre hemos sido uno.
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Si un día...
PuisiHecho por y para mí. Una dedicatoria por si quiero recordarme. Querida yo: La mentira más grande que te has impuesto, es que no puedes cambiar lo que te sucede. La vida nunca se ha visto reflejada en quién sacrifica más, pero en quién está dispuesto...
