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Heeseung:

Fui a la escuela al día siguiente, hice lo mínimo posible, fui a casa por la tarde y deambulé por las calles hasta que oscureció, luego prendí mi música de forma intermitente durante la mayor parte de la noche, solo para enojar a Soobin. Los malditos viejos estaban hasta el final del pasillo, por lo que no me escucharían.

La sincronicé para que Jaehyun tuviera tiempo suficiente para irse a dormir, y entonces hacerlo volar con la música más molesta posible, esperando a que golpeara la pared varias veces, lo que por supuesto ignoraría. Entonces vendría finalmente a gritarme. La apagaría por un momento y comenzaría de nuevo cuando pensara que estaba dormido. En algún momento del mes siguiente, se espabiló y comenzó a usar tapones para los oídos y a encender un ventilador ruidoso entre su cama y la pared contigua a mi habitación. Hice nota mental para encontrar algo más que lo enojara. Quiero decir, ¿para qué más tenía que vivir? ¿Cierto?

Pero, de todos modos, la rutina aburrida continuó –todo eso durante la semana y el "voluntariado" en el hospital en el fin de semana entre el mediodía y las 5:00. El único punto brillante de mi vida era Shim Jake. Sin importar cuántos tratamientos tuviera, o qué tan mal se sintiera, él se disfrazaba de payaso tanto como podía y actuaba para un grupo de niños u otro.

Le había preguntado a la Sra. Chanmi, que parecía ser mi supervisora inmediata, si se me podía asignar para ayudarlo con todas sus actuaciones. Ella se lo presentó a Groucho –Sra. Lee– y ambas estuvieron de acuerdo en que "sería bueno para mí", así que eso es lo que hacía la mayor parte del tiempo.

Me estaba acostumbrando a los pequeños rugrats, y en realidad comencé a desear tenerlos cerca. Durante el resto de agosto, y durante todo el mes de septiembre y parte de octubre, llegué a conocer a cada uno por su nombre y aprendí algunas de sus metas en la terapia física de Jake. Ayudé más y más con sus objetivos, así como a estar en el show con él.

Algunos de los niños en la unidad de quemados todavía me llamaban carne fresca, y juré que nunca lo perdonaría por eso. Traté de decirle que prefería los otros dos pabellones porque no me llamaban así, pero creo que él sabía que no era cierto. Tenía un poco más de vínculo con los niños en la unidad de quemados. Después de todo, fueron los primeros que conocí, y me pareció que hacíamos los shows de payasos allí, un poco más a menudo. Jake decía que todo salía bien, y que los shows eran igual de frecuentes en cada sala. No discutí con él... pero todavía pensaba que se inclinaba un poco más hacia los niños quemados.

[...]

Mientras tanto, las cosas se estaban yendo al infierno rápidamente en casa. Sihyun parecía odiarme solo por principio. Nada de lo que hacía era bastante bueno. No hacía las tareas lo suficientemente rápido, o no hacía suficientes tareas, o no las hacía bien. No comía lo suficiente o comía demasiado. No le decía a mi madre que me gustaba lo que cocinaba –que no me gustaba– o lo agradable que se veía la casa. O bien, mis cumplidos no eran sinceros.

No me llevaba bien con Jaehyun, lo cual era verdad, pero todo no era por mi culpa. Él tampoco se llevaba bien conmigo. Y no apreciaba los esfuerzos de Sihyun en mi nombre. Lo cual también era cierto. No lo hacía, pero solo porque nunca vi ninguno, de hecho. Todo eso fue parte del curso.

Pero cuando traje a casa todas F en mi reporte académico a mediados de octubre, se armó la gorda.

—¿Qué haces todo el día en la costosa escuela que pago? —gritó esa última parte.

Él siempre mencionaba que usaba su salario ganado con tanto esfuerzo, para asegurarse de que fuera a las mejores escuelas para poder hacer algo de mí mismo. ¿Cómo me atrevía a pagarle siendo un inútil delincuente juvenil que no podía obtener calificaciones aprobatorias, aunque fueran dadas gratis?

✧ sunbeam-heejake ✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora