En unos segundos, me coloque entre el visitante y la tribu, a 3 metros de distancia. Apuntando mi lanza hacia el visitante.
- ¡Quieto ahí! ¿Quien eres y que haces aquí?
Ahora cerca del invitado, lo comencé a ver con mejor claridad. Era un gato babosa con una gran cantidad de cicatrices, pero la mas notoria era la de su ojo derecho, en su mano izquierda llevaba un tipo de piedra lisa de color verde con 2 palillos, y una lanza en su mano derecha y otra en su espalda, lo cual no entiende, ya que no lleva ningún tipo de cuerda o carcaj.
El gato rojo alza la vista hacia mi, cuando aun seguía apuntando con mi lanza. Quien solo lo miraba con una cara que demostraba que no le importara.
- Quieto muchacho, estoy aquí de paso, no quiero problemas, solo quiero unas indicaciones. Llama a tu jefe o lo que sea que tengan aquí.
Molesto por como me trataba el desconocido, como si no importara nada.
- ¿Y que si no lo hago? Pareces extremadamente sospechoso. Además, ¿qué es esa piedra verde que llevas?
- Nada que te interese. Tengo bastante prisa, y si no te mueves tu, yo te moveré.
El invitado usa su lanza para atravesar un poco el suelo y que esta se quede quieta en su sitio.
Ahora algo intimidado, miro mi entorno. La tribu ya había notado el individuo y la mayoría fue evacuada al gran árbol, algo que en casos normales, yo también haría, ya que no tengo experiencia en combate real.
También observo como algunos gatos babosas con lanzas manteniendo las distancias, como si esperaran algo. Y no pude notar a Miguel entre ellos, seguro estaba con el resto de la tribu.
Volví a mirar al individuo, pero ahora también noto a un supervisor detrás del mismo.
Un ser vivo que era como un ojo de metal con unas 4 antenas que hacían de pestañas y que giraban alrededor del ojo, con un cuerpo de color verde que cubría al ojo metálico hasta llegar al suelo, pareciendo una tela transparente envolviendo al ojo mas que un cuerpo.
Lo único que hacen es mirar, pero siempre se nos enseño tener cuidado con su presencia. No se la razón de esto, pero eso no importa ahora.
El invitado se comenzó a desesperar, los guardias se ponían detrás de mi, protegiendo el gran árbol, aunque dejándome completamente solo.
Entonces, veo a un gato negro salir del bosque de detrás del gato negro, siempre en su punto ciego. Es de nuestra tribu.
El gato se acerca silenciosamente, hasta que lanza una piedra hacia el visitante.
Este, como si tuviera ojos en la espalda, se agacha, esquivando la piedra, la cual sigue recto hasta golpear mi cara. Noqueándome.
Lo siguiente que supe al abrir los ojos fue al visitante con su pierna en mi pecho, sin dejarme levantarme, y con su lanza apuntándome al cuello.
- Muévete y morirás. Y si alguien se mueve, morirá. Traigan a su jefe, o este muchacho no volverá a levantarse.
El gato rojo, con la nueva lanza que acaba de obtener, apunta hacia mi espalda, que ahora en verdadero peligro, comenzó a sudar, nunca había sentido un peligro tan real en su corta vida, ni cuando bestias atacaban la tribu.
Ahora, el grupo de guardias, sin saber que hacer, comienzan a estresarse y apuntar sus lanzas hacia el gato rojo, sin intentar hacer un movimiento, pero para saltar a la accion en cualquier momento
- ¡ALTO TODO EL MUNDO!
Un fuerte grito resonó por todo el lugar.
De entre la multitud de soldados, aparecen 2 figuras. Una era Miguel, la otra era su padre.
- ¿Eres el jefe de este lugar?
Pregunto el gato rojo, con un tono amenazante hacia el líder, un gato babosa color naranja claro de 2 metros de altura, con una gran masa en todo su cuerpo, por no llamarlo extremadamente gordo.
- Si, me llamo Gard, y hablare en el momento que dejes al chico.
Dijo de manera calmada pero con una cara seria.
El gato rojo levanto su pierna y dejar de apuntarme con su lanza, liberándome. Yo comencé a correr hacia Gard en el mismo instante que supe que no lo iban a atravesar. Luego habló el gato rojo.
- Ahora que estas aquí, dime donde esta la entrada hacia Moon, necesito entrar y urgente.
Gard, sorprendido, señalo hacia una dirección, a un lugar que se nos enseñaron que bajo ningún concepto nos acercaremos, a los dominios del dios maquina.
- Sigue el barranco. Busca unas tuberías de agua y entrar en ellas, es la única manera de entrar, aunque me pregunto si podrás aguantar la respiración el tiempo suficiente.
El gato rojo comenzó a caminar como si no estuviéramos ahí. Los guardias que estaban en el camino, se apartaron para dejar salir al gato rojo y el supervisor que seguia al gato.
Ahora que veo al gato rojo por la espalda, veo unos tumores en su espalda, habiendo uno del tamaño de una cabeza rodeado de unos mas pequeños, todos teniendo una cicatriz en forma de X, donde su lanza de la espalda atraviesa el mas grande.
El gato rojo, sin apartar la vista de nosotros, se comenzó a ir por el bosque junto al supervisor verde, en la dirección en la que Gard le dio, hasta desaparecer de la vista. Luego Gard comenzó a dar indicaciones.
- Todo el mundo, sigan con lo suyo, aquí no paso nada. Y ustedes 2...
Dijo mirando directamente hacia mi y Miguel.
- Vayamos al árbol, ya se esta haciendo tarde, falta poco para caer la noche, pero esto no va a terminar aquí... Me van a contar todo lo que paso en este lugar.
Mientras que mira el suelo, comienzo a caminar junto a Miguel, ambos detrás de Gard, el líder de la tribu.
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Supervivencia Del Mas Apto (Rain World)
FantasyEn un mundo salvaje, donde la naturaleza reconquisto las ciudades abandonadas, habiendo peligros en cada esquina. En este se encuentra una tribu de gatos babosas, en la que se encuentra uno el cual espera vivir una vida tranquila... Pero no sabe lo...